Este lunes, el Parlamento de Cantabria ha dado luz verde, con el apoyo de los partidos de la oposición (PRC, PSOE y Vox) y la oposición del grupo popular, a una proposición no de ley que insta al Gobierno de la región (PP) a asignar fondos en el Presupuesto de 2026 para que los colegios permanezcan abiertos después del horario lectivo en el año escolar 2026-2027. La idea es que los estudiantes puedan acceder sin coste a servicios como bibliotecas, gimnasios y patios.
Además, la propuesta sugiere que se realicen pruebas piloto durante el curso actual en centros que cuenten con los recursos necesarios. Originalmente presentada por Vox, esta iniciativa fue parcialmente alterada tras aceptar una enmienda del PSOE que modifica la asignación presupuestaria solicitada para asegurar ‘la efectiva implementación del servicio’ y mejorar aspectos como la seguridad y la accesibilidad de las instalaciones.
El PP, por su parte, presentó una enmienda que Vox no aceptó, argumentando que los ‘populares’ pretendían desvirtuar la iniciativa y eliminar el compromiso de financiación. Álvaro Aguirre, diputado del PP, indicó que muchos colegios en Cantabria ya ofrecen acceso fuera del horario lectivo, pero criticó la alianza de Vox con el PSOE a pesar de la deuda del Gobierno central con las comunidades autónomas para mejoras en los centros educativos.
El PRC apoyó la medida aunque criticó a Vox por no apoyar la reducción de la jornada laboral como solución a la conciliación y la baja natalidad. Teresa Noceda del PRC destacó que la mejor situación para los niños es estar con sus padres, mientras que Armando Blanco de Vox defendió la propuesta como beneficiosa para la conciliación y la infancia.
Otra propuesta de Vox, que buscaba medidas contra las prácticas colusorias en licitaciones públicas, fue rechazada con los votos de otros partidos, quienes criticaron la propuesta como oportunista y atacante hacia el personal funcionario y el sistema de contratación pública. Tras el rechazo, Leticia Díaz de Vox acusó a los otros partidos de permitir que las prácticas cuestionables continúen.