Alfonso Fernández Mañueco, presidente de la Junta de Castilla y León, ha solicitado que la prevención y control de incendios se considere una cuestión de Estado y se extraiga de la confrontación política y la lucha partidista, ya que estos desastres no reconocen fronteras territoriales ni diferencias políticas.
En una sesión extraordinaria del Pleno para detallar las acciones de la Junta ante los incendios de este verano, Fernández Mañueco transmitió un mensaje de apoyo, tranquilidad y esperanza a los damnificados y reafirmó su compromiso con la recuperación.
El presidente destacó la importancia de una implicación conjunta en la lucha contra los incendios, mencionando que no entiende de fronteras territoriales ni de diferencias políticas. Además, ha argumentado que Castilla y León es parte integral de España, y enfatizó, En CyL no somos un ente en medio de la nada. Somos España. Y es España la que está ardiendo, reiterando al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, las necesidades previamente comunicadas.
Fernández Mañueco propuso una Conferencia de Presidentes específica para abordar el desafío de los incendios y mencionó la posibilidad de enfrentar este tema con rigor y en reuniones sectoriales, basándose en la experiencia acumulada.
NUEVOS INCENDIOS
Ante la amenaza de nuevos incendios, el presidente advirtió la necesidad de un nuevo modelo de actuación, dado que el problema podría repetirse. Subrayó la importancia de una preparación y acción colectiva, insistiendo en que los incendios son un asunto nacional y requieren un esfuerzo mancomunado.
En su discurso, describió tanto la devastación causada por el fuego como la solidaridad y valentía de aquellos que enfrentaron las llamas para proteger sus comunidades. Criticó a quienes buscan beneficiarse políticamente de la situación, mientras la mayoría trabaja unida. Reiteró que en Castilla y León, la prioridad ha sido siempre vencer al fuego, proteger a las personas y articular la recuperación.
Finalmente, Fernández Mañueco hizo un llamado a todos los parlamentarios a colaborar y tener una altura de miras frente a este desafío, esperando que las ayudas lleguen prontamente a los afectados, proporcionando esperanza y tranquilidad.













