La vicepresidenta tercera y consejera de Vivienda, Juventud y Políticas Migratorias del Gobierno de Navarra, Begoña Alfaro, ha manifestado ante el retraso en el inicio de las obras de las 108 viviendas protegidas en Maristas de Pamplona, que «tanto el Gobierno de Navarra como el Ayuntamiento de Pamplona nada pueden decir en cuanto a los plazos de inicio, ya que esto es un acto que no está administrativamente arreglado».
Alfaro ha respondido en el pleno del Parlamento a una pregunta oral de UPN sobre «las medidas ante el nuevo retraso en el inicio de las obras» de estas viviendas. Y le ha trasladado al parlamentario regionalista Juan Luis Sánchez de Muniáin que «usted es perfecto conocedor de los procedimientos administrativos, porque no en vano fue usted concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Pamplona y vicepresidente del Gobierno de Navarra».
«No sé qué pretende, no sé qué busca trayendo una y otra vez al foco público el tema de Maristas, con frases hechas, con pronunciamientos populistas, pidiéndonos que tomemos medidas que usted sabe perfectamente que no podemos tomar y que usted en ningún caso hubiese hecho, ni cuando era concejal ni cuando era vicepresidente, porque sabe que la ley se lo impide», le ha reprochado al parlamentario.
Para Alfaro, UPN «está haciendo un flaco favor a los adjudicatarios de esta promoción, cuyo único objetivo es ver levantadas cuanto antes sus viviendas y al precio público establecido, algo que siempre hemos defendido, defendemos y defenderemos desde el Gobierno de Navarra».
La consejera ha comentado que su «único objetivo» es que «estas viviendas públicas se hagan y que los adjudicatarios puedan disfrutar de ellas al precio establecido».
No obstante, ha comentado que «este proyecto está haciendo un daño muy grande a las políticas de vivienda en nuestra Comunidad y la única responsabilidad recae» sobre la empresa.
Por su parte, Sánchez de Muniáin ha indicado que «no vamos a dejar en el olvido ni vamos a silenciar la injusticia que, con su colaboración y con la del Ayuntamiento de Pamplona, se les está sometiendo a estas 108 unidades familiares». «Se trata de unas viviendas protegidas que sus socios en el Ayuntamiento de Pamplona planearon de la mano de una promotora con sede en Guipúzcoa, la cual, operando mediante unos manejos turbios -y usted lo sabe- perjudica a todas las personas que necesitan una vivienda protegida», ha dicho.
Ha criticado que los adjudicatarios «hoy siguen sumidos en la más absoluta desprotección por falta de garantías y máxima incertidumbre». «El ya conocido como ‘pufo de Maristas’ les implica a ustedes como garantes que deben ser para que la vivienda protegida se construya y se entregue a sus adjudicatarios en el precio y el plazo regulados en la normativa. Y nada de esto va a suceder», ha indicado, para criticar que «todos esos retrasos e incumplimientos se suceden ante su inacción». «Casi una cuarta parte de los adjudicatarios ha renunciado a su vivienda, a pesar de la difícil situación del acceso a su vivienda y a pesar de disponer de una adjudicación en pleno centro de la capital; así de desesperante e injusta es esta situación para que se crean estas personas abocadas a renunciar a uno de los empeños más importantes de sus vidas», ha expuesto.