El presidente de la mesa de contratación de los trabajos de duplicación de los túneles de Belate, Jesús Polo, ha declarado que no ha recibido sobornos por la adjudicación de dichas obras. “Conmigo, cero”, afirmó Polo, agregando que desconoce la situación con respecto a otros miembros de la mesa: “no lo sé”, pero “no creo”. “A mí se me puede investigar todo lo que quieran; es más, lo deseo”, enfatizó durante su intervención.
En su testimonio ante la comisión de investigación del Parlamento de Navarra, respondiendo a las preguntas del grupo Contigo-Zurekin, Polo expresó su confianza en la honestidad de los técnicos de la mesa, aunque admitió no conocerlos profundamente. Respecto a posibles vínculos de los miembros de la mesa con las empresas licitadoras, reconoció que algunos habían colaborado con ellas en lo profesional, pero no personalmente, a su saber.
Polo describió la adjudicación como un proceso ordinario, aunque señaló que el secretario de la mesa expresó numerosas objeciones desde el inicio. Mencionó que existió un “ambiente de guerra abierta” debido a desacuerdos intensos que surgieron durante el proceso. Afirmó que no basó su valoración en las de otros técnicos, y que emitió su voto en tercer lugar sin dudas sobre la decisión.
Tras finalizar el procedimiento, Polo manifestó sentir un “regusto malo” por cómo se desarrollaron los eventos, aunque nunca anticipó que estos provocarían controversia. Además, lamentó no haber confrontado con mayor firmeza al secretario cuando fue acusado. “Traté de que no hubiera tan mal ambiente, pero no lo conseguí”, concluyó.
Finalmente, reiteró que no ha tenido contacto con ningún miembro del gobierno ni con partidos políticos desde que se publicó el informe de la UCO, y se defendió de las narrativas que lo implicaban en irregularidades, asegurando que no ha sido consultado por ninguna parte interesada. También negó conocer a Antxon Alonso, administrador de Servinabar, y expresó su sorpresa por la falta de detección de problemas por parte del secretario de la mesa.