En 2023, más de 315.000 trabajadores autónomos abonaron una cuota inferior a la mínima del sistema precedente durante el primer año de regularización, lo que representa cerca del 10% del total de este colectivo y aproximadamente la mitad de los que se encuentran en estos tramos, de acuerdo con la Unión de Asociaciones de Trabajadores Autónomos y Emprendedores (Uatae).
Según Uatae, la mayoría de estos autónomos son económicamente vulnerables por percibir ingresos por debajo del SMI, y el nuevo sistema ha contribuido a reducir su vulnerabilidad al disminuir sus costes de cotización manteniendo una protección futura comparable.
Por otro lado, los autónomos societarios han mostrado una mayor adaptabilidad al nuevo sistema, reflejando cambios significativos en las bases de cotización gracias a una mejor orientación financiera. En cuanto a los tramos intermedios, estos no han experimentado cambios significativos, y los tramos más altos, aunque han visto algunos cambios, estos han sido de poco impacto debido a que sus cotizaciones siguen siendo bajas en relación con sus ingresos.
Adicionalmente, la renta media de los autónomos se sitúa en torno a los 25.000 euros, con una diferencia notable entre societarios, que alcanzan casi 39.000 euros, y no societarios, que no superan los 18.500 euros. En 2023, el 45% de los autónomos físicos y el 16% de los societarios estaban en la tabla reducida, excluyendo a quienes no declaran rendimientos, según indica Uatae.
La organización también ha señalado que la reforma ha impulsado un aumento en la base de cotización media y, consecuentemente, en la recaudación durante el primer año de aplicación. A su vez, la base de cotización media de los hombres ha crecido más que la de las mujeres, lo que según Uatae indica que las mujeres autónomas ingresan menos que los hombres, dado que las nuevas cuotas dependen de los ingresos.
María José Landaburu, secretaria general de Uatae, ha enfatizado: “estos datos demuestran la importancia de continuar desarrollando el nuevo sistema de cotización por ingresos reales a partir del 1 de enero de 2026”.