La totalidad de la carne fresca ofrecida por Aldi proviene de fuentes nacionales y el 90% de estas referencias dispone del certificado de bienestar animal, que «asegura un mayor cuidado en todo el proceso», según un anuncio de la empresa.
De acuerdo con el Observatorio de Frescos de Aldi, el consumo de carne está incrementando su importancia en las compras de los consumidores españoles. Actualmente, constituye el 27% del gasto en frescos, alcanzando un promedio de casi 570 euros anuales por familia, con un aumento constante desde el año 2021.
Aldi abastece su carne de áreas con una fuerte herencia en ganadería, incluyendo Cataluña, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Aragón, Extremadura y Galicia.
Utilizando su estrategia de precios reducidos, Aldi calcula que las familias podrían economizar un promedio de más de 230 euros en sus compras semanales durante el verano, con base en estudios de Kantar Worldpanel.
Además, la cadena ha introducido una variedad de carnes «al mejor precio», que incluyen panceta de cerdo, variados pinchos para barbacoa o de cerdo, longaniza fresca, cabeza de lomo de cerdo, hamburguesas de pavo y contramuslo de pollo deshuesado sin piel.
















