El consejero de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural de la Junta de Andalucía, Ramón Fernández-Pacheco, ha expresado su firme postura contra la consideración del aceite de oliva como un «bien de lujo» y ha recordado que «no podemos volver al candado en el supermercado», haciendo referencia a las medidas de seguridad extremas que algunos comercios aplicaron anteriormente debido al aumento de precios del producto.
En un encuentro organizado por Europa Press Andalucía y Heineken, Fernández-Pacheco evitó comentar directamente sobre los precios actuales del aceite, pero destacó la importancia del aforo como «una herramienta estadística y científica que facilita la estabilización del mercado y la consecución de acuerdos comerciales justos».
Afirmó que el precio del aceite de oliva es influenciado por «demasiadas vicisitudes, con oscilaciones rápidas que generalmente perjudican al agricultor». El consejero insistió en la necesidad de encontrar un equilibrio que asegure el futuro del sector, mencionando la «modernización de las explotaciones», la «garantía de agua» y la «seguridad en la producción» como elementos clave para la estabilidad.
Finalmente, subrayó la importancia de un precio medio que beneficie a agricultores y sea asequible para las familias, indicando que «El precio ideal del aceite es aquel que resulta suficiente para que los agricultores ganen dinero y las familias se lo puedan permitir», y recalcó la necesidad de hallar un equilibrio que satisfaga tanto a productores como a consumidores.