Ángela de Miguel, presidenta de Cepyme, ha expresado su opinión respecto al impulso que el Ministerio de Trabajo desea dar al registro horario, tras el fracaso del proyecto de ley para recortar la jornada a 37,5 horas. Según De Miguel, esta medida es “innecesaria” dado que el sistema vigente ya es efectivo.
Durante la presentación del ‘Indicador Cepyme de la Situación de la pyme del segundo trimestre’, De Miguel ha comentado que el nuevo sistema de registro horario, en la forma que se propone, resultará “muy perjudicial” para las pymes, similar a la propuesta de reducción de jornada, aunque ha señalado que aún no se dispone de un texto definitivo que permita evaluar con precisión el impacto de esta legislación.
Desde la implementación del Real Decreto Ley de control horario en 2019, la normativa se ha desarrollado sin “especial conflictividad”, y su aplicación podría reducir la productividad, especialmente en microempresas, además de ocasionar problemas relacionados con la Protección de Datos, añadió De Miguel.
La presidenta de Cepyme ha destacado las dificultades particulares que enfrentan las pymes españolas, lo que podría llevar a incumplimientos involuntarios de la norma. “¿Qué vamos a hacer con las empresas pequeñas que no están digitalizadas? ¿Qué vamos a hacer con las que no tienen un técnico cuando se caiga el sistema o tengan problema con la tecnología o programa que se utilizará? Supondrá un incremento de costes”, ha indicado De Miguel, subrayando que esto afectará principalmente a las microempresas y a las ubicadas en zonas rurales.
Finalmente, De Miguel ha manifestado su desacuerdo con la necesidad de esta reforma, esperando que la normativa propuesta no prospere.