En 2024, los activos pertenecientes a la intermediación financiera no bancaria (IFNB) alcanzaron casi 400.000 millones de euros, marcando un incremento del 13,8% respecto a 2023, donde se registraron 347.000 millones de euros. Este crecimiento refleja un informe reciente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) publicado este viernes.
Este sector representa ahora un 7,2% del sistema financiero total de España, una cifra que, aunque superior a años anteriores, sigue siendo menor comparada con el promedio de 14% en otras economías desarrolladas. Dentro de la IFNB, los fondos de inversión siguen dominando con un 91,7% del total, seguidos por los vehículos de titulización y los establecimientos financieros de crédito, con un 5,4% y 2% respectivamente.
El volumen total del sistema financiero de España creció un 4,5% en el mismo año, alcanzando los 5,5 billones de euros, con las entidades no bancarias amasando 1,65 billones de euros, lo que representa un aumento anual del 5,5% en este segmento. A pesar de la predominancia bancaria en la economía española, similar a otros países europeos, la CNMV asegura que no se perciben vulnerabilidades significativas que afecten la estabilidad financiera en este sector.
En términos de riesgo, los fondos de inversión muestran estabilidad en el crédito y mejoras en la liquidez, con un bajo nivel de apalancamiento debido a la escasa exposición a derivados. Además, las herramientas de gestión de liquidez para estos fondos están cada vez más disponibles, y las pruebas de resistencia recientes confirman la solidez del sector frente a posibles retiros masivos de inversiones.











