En una decisión unánime, el Banco Central de Brasil ha decidido mantener su tasa de interés de referencia en el 15%, en línea con las previsiones del mercado. Este anuncio se produce en un momento de notable incertidumbre global, según ha comunicado la propia entidad.
La actual volatilidad del mercado, impulsada en parte por las políticas arancelarias de Estados Unidos, ha llevado al Banco Central a adoptar una postura de prudencia en su política monetaria. “El Comité continúa monitoreando los anuncios sobre la imposición de aranceles comerciales estadounidenses a Brasil y el impacto de la evolución de la política fiscal interna en la política monetaria y los activos financieros, lo que refuerza su postura cautelosa en un escenario de mayor incertidumbre”, señalan desde el Banco.
El contexto actual se distingue por elevadas expectativas de inflación y una economía que muestra resiliencia, con tensiones en el mercado laboral y expectativas económicas volátiles. Desde el Banco Central, subrayan que para contener la inflación en este entorno, “requiere una política monetaria significativamente contractiva durante un período muy prolongado”.
Las proyecciones de inflación para los años 2025 y 2026 se mantienen elevadas, con un 4,8% y un 4,3% respectivamente, aunque se espera que para el primer trimestre de 2027, la inflación disminuya hasta el 3,4%.














