La Comisión Europea ha comunicado este lunes que ha dado su visto bueno a un régimen de ayudas impulsado por España para destinar 408 millones de euros a la descarbonización del tejido industrial. Se trata de un programa que Bruselas considera proporcionado y alineado con los objetivos comunes establecidos en el Pacto para una Industria Limpia.
El Ejecutivo comunitario explica en una nota que la finalidad de este plan es avanzar en la descarbonización de los procesos de producción en instalaciones ya operativas de la industria manufacturera. Para ello, se apoyarán inversiones destinadas a recortar las emisiones de gases de efecto invernadero generadas por la actividad industrial y a mejorar la eficiencia energética de los procesos.
Según los datos facilitados por Bruselas, España calcula que este esquema permitirá una reducción anual de emisiones de gases de efecto invernadero de en torno a 1,6 megatoneladas de CO2. El régimen de ayudas pretende respaldar inversiones en tecnologías como la electrificación, la transición hacia el hidrógeno renovable o de bajas emisiones de carbono, la recuperación del calor residual y la captura, almacenamiento y utilización de carbono, con especial incidencia en sectores como el químico, la cerámica, el papel y la metalurgia.
Las ayudas se articularán mediante subvenciones directas, abiertas a compañías de cualquier tamaño y a instalaciones y ramas de actividad incluidas o no en el régimen de comercio de derechos de emisión. El importe máximo de apoyo por empresa y proyecto se fija en 200 millones de euros.
Además, el importe concreto que recibirá cada empresa se determinará en función de los costes de inversión subvencionables y de unas intensidades de ayuda previamente definidas. Las subvenciones se otorgarán siguiendo el orden de llegada de las solicitudes hasta agotar el presupuesto disponible.
Los proyectos que resulten beneficiarios deberán estar operativos como muy tarde 60 meses después de la concesión de la ayuda. Con el fin de evitar un falseamiento indebido de la competencia, la Comisión precisa en su comunicado que estas ayudas no podrán destinarse a financiar incrementos de la capacidad de producción de las empresas beneficiarias.










