El sindicato Gestha, que representa a los técnicos de Hacienda, ha expresado su apoyo a la reducción de la deuda de las comunidades autónomas, aunque ha señalado que esto “no excluye” la necesidad de negociar un renovado modelo de financiación, considerado por ellos como “la solución”.
“Vemos datos objetivos transparentes, que están sobre la mesa, y que benefician a quiénes más deuda y más población tienen. Para las comunidades autónomas es una oportunidad, sobre todo para las más endeudadas y luego debería ir acompañado del cambio de modelo de financiación, sabemos que es una quimera, pero es una obligación de este Gobierno o de otros”, ha aseverado el presidente de Gestha, Carlos Cruzado.
“Ambas medidas son compatibles”, han insistido tanto él como el secretario general de Gestha, José María Mollinedo. Preguntados sobre el modelo de financiación autonómica, este último ha destacado que debe primar la “suficiencia”, basada en el coste de los servicios, pero también “saber que los recursos tienen una recaudación normativa”, han indicado en relación a las quejas de algunas autonomías sobre “infrafinanciación”.
“Hay que dotar de cierta armonización a los impuestos cedidos”, ha afirmado Cruzado, cuyos dirigentes han señalado que la mayoría de las autonomías “han incumplido la regla de gasto” el último año, incluyendo a Galicia, con Baleares y La Rioja a la cabeza.
También han argumentado a favor de un aumento del umbral de tributación y han rechazado la cesión completa del IRPF a Cataluña. “El Impuesto de la Renta no nos parece positivo que se traslade al 100% a las comunidades autónomas o la desmembración de la Agencia Tributaria”, han comentado.
SALARIO MÍNIMO
Además, han solicitado que el nuevo salario mínimo interprofesional de 2026, que se discutirá en la mesa tripartita del diálogo social, continúe exento de IRPF para facilitar un acercamiento entre Trabajo y CEOE.
Argumentan que, de no ser así, se elevarían los costos para los empresarios tanto en términos salariales como en aumento de las cotizaciones sociales.
En particular, Gestha favorece un incremento del umbral de tributación, tras la solicitud del Ministerio de Trabajo a la Comisión asesora para el análisis del Salario Mínimo (Caasmi) de trabajar con dos supuestos; uno con un importe bruto si el SMI tributa en el IRPF y otro neto si no lo hace -como hasta ahora-.
En este contexto, los técnicos encuentran dos motivos “relevantes” para pedir que el SMI no tribute en el IRPF. Primero, “porque es la mínima porción de sueldo posible que un trabajador cobra”, y segundo, porque un SMI neto es un importe menor que facilita la negociación con los agentes sociales, “permitiendo a la patronal alcanzar un acuerdo, ya que las empresas tendrán un menor coste salarial al contratar a 2,4 millones de personas a las que pagan el salario mínimo”.
PRESUPUESTOS Y DEFENSA
En relación al gasto en Defensa, Gestha considera que existe “margen” para que España alcance el objetivo de inversión del 2,1%, “no del 5%”, como ha solicitado el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
“En agosto hemos más que duplicado el gasto de los dos años anteriores”, ha confirmado su secretario general, en sintonía con el presidente de la organización, Carlos Cruzado, y como se presentó en el congreso que celebran en A Coruña. Esto para ratificar, además, que “está habiendo una ejecución presupuestaria más potente que en años anteriores, ya desde la época de Montoro”, el exministro de Hacienda del PP.
Además, han advertido sobre la necesidad de un control efectivo en las medidas que se implementen de cara a una reforma fiscal, haciendo referencia también a los Presupuestos Generales del Estado (PGE) prorrogados. “El Gobierno se enfrenta a la necesidad de aprobar decretos leyes, pero luego hay que convalidarlos en el Congreso y todos somos conscientes del problema para sacar adelante proyectos con sus aliados”, han explicado.