En la media sesión de este jueves, el Ibex 35 registraba un descenso del 0.45%, lo que lo situaba en 12.223,2 puntos, distanciándose de los 15.300 puntos alcanzados el pasado martes.
Los inversores se mantienen atentos al inicio hoy del simposio anual de banqueros centrales en Jackson Hole, Wyoming, EEUU, especialmente tras la divulgación de las actas de la reunión de julio de la Reserva Federal (Fed) de EEUU el día anterior.
Desde Renta 4, los analistas indicaron que las actas ‘reflejan la preocupación de los banqueros de la Fed por la inflación, que se mantiene por encima del 2%, y que continúan priorizando la estabilidad de precios frente al mercado laboral, ya que, pese a los signos de desaceleración, todavía es robusto.’ Además, mencionaron que ‘Algunos miembros han comentado que la inflación lleva superando ese nivel del 2% durante un prolongado periodo de tiempo y que ello eleva el riesgo a que las expectativas de inflación a largo plazo se desanclen. De hecho, no existe consenso sobre el impacto de los aranceles en la inflación, siendo unos pocos los que consideran que dicho efecto será puntual y no persistente.’
Este mismo jueves, también se revelaron los índices PMI del sector privado en la eurozona, que evidenciaron una mejora en agosto impulsada por las manufacturas, pese a las barreras arancelarias, alcanzando un pico de 51,1 puntos, el más alto en 15 meses. En Alemania y Francia, las economías más grandes de la zona, se observaron signos leves de recuperación en agosto tras las tensiones comerciales iniciales con Estados Unidos.
El Ibex 35 mostraba más de la mitad de sus valores en negativo, con Telefónica, Puig, ArcelorMittal, Inditex y Cellnex registrando las mayores caídas. Por otro lado, Indra, Repsol, Unicaja, CaixaBank y Enagás encabezaban las subidas.
Las principales bolsas europeas mostraban tendencias similares, con la excepción de Milán que ascendía un 0.12%. París, Londres y Fráncfort experimentaban caídas en su negociación. El precio del barril de crudo Brent y el West Texas Intermediate mostraban incrementos, mientras que el euro cotizaba frente al dólar a 1,1656 y el bono a 10 años veía aumentar su interés hasta el 3,321%.














