Las acciones de Inditex, la mayor compañía cotizada de la Bolsa española, han concluido este viernes con una subida del 1,23%, hasta los 55,76 euros por título, quedándose muy cerca de sus máximos del pasado 4 de diciembre de 2024, cuando terminó la sesión en los 55,98 euros.
Durante la jornada, el gigante textil llegó a rebasar ese nivel récord, ya que a primera hora de la mañana, con un avance de casi el 2%, marcó un máximo intradía en los 56,1 euros; no obstante, tras alcanzar ese techo, las ganancias se fueron moderando.
De acuerdo con los datos de mercado recopilados por Europa Press, el grupo gallego de moda suma en 2025 una revalorización del 12,33% y presenta una capitalización bursátil de 173.785 millones de euros.
Pese a ello, la evolución bursátil de Inditex a lo largo del ejercicio ha sido débil, e incluso negativa en algunos tramos, ya que entre mediados de marzo y comienzos de este mes el título cotizó por debajo de los precios de cierre de 2024 y llegó a marcar en agosto un mínimo en los 40,8 euros.
El reciente ‘rally’ alcista de las dos últimas semanas —que casi ha llevado a la acción a marcar nuevos máximos— se atribuye a los últimos resultados trimestrales de la compañía, que superaron ampliamente las previsiones del mercado.
En concreto, el pasado 3 de diciembre el conglomerado comunicó un beneficio histórico en el tercer trimestre, de agosto a octubre, con un alza del 9%, hasta los 1.831 millones, y una subida del 4,9% en las ventas, hasta los 9.814 millones.
Así, Inditex obtuvo un beneficio neto de 4.622 millones de euros en los nueve primeros meses de su ejercicio fiscal 2025-2026 (del 1 de febrero al 31 de octubre), lo que implica un incremento del 3,9% frente al mismo periodo del año anterior.
Desde la víspera de la publicación de estas últimas cuentas, Inditex acumula en Bolsa una apreciación del 13,6%.
Este hito particular de Inditex ha coincidido con otro de carácter más general para el mercado español, ya que su índice de referencia, el Ibex 35, ha superado esta mañana por primera vez en su historia la barrera de los 17.000 puntos, aunque por la tarde perdió impulso y terminó cerrando por debajo de ese umbral.
ANALISTAS
“Camino despejado”, sentenciaron hace dos semanas los analistas de Bank of America con motivo de la presentación de resultados de Inditex tras un año de dudas sobre la evolución del sector textil.
“La aceleración del crecimiento es un buen augurio para el primer semestre de 2027 […] y debería allanar el camino para mejoras en el beneficio por acción”, expusieron. Por ello, reiteraron su recomendación de “comprar”, si bien elevaron su apuesta en torno al precio objetivo de los 54 a los 60 euros.
El analista de mercados de eToro, Javier Molina, destacó que Inditex batió las previsiones del consenso y que afianza su transición hacia un posicionamiento más “premium” en un contexto en el que el ciclo del consumo empieza a mostrar cierta moderación.
“El tercer trimestre fue especialmente sólido y superó con claridad las previsiones del consenso”, incidió, mientras que, a su juicio, el giro al segmento de lujo se refleja en la inversión en tiendas emblemáticas, en la renovación de espacios estratégicos y en proyectos como el nuevo edificio de Zara en Arteixo, orientado a producto y tecnología.
La compañía, según Molina, muestra una “notable capacidad de adaptación” a las preferencias del consumidor, consolidando colecciones de mayor valor percibido.
“Pero este avance llega en un momento exigente del ciclo, y el mercado vigilará si la compañía es capaz de mantener el nivel que ella misma ha marcado”, avisó.
Por su parte, el analista de IG, Sergio Ávila, sostuvo que a corto plazo estos datos respaldan que Inditex mantenga prima frente al sector, aunque advirtió igualmente de que el listón de expectativas es “muy alto”.
“Si la compañía sigue defendiendo márgenes y controlando inventarios, veo más probabilidad de consolidación en rangos altos que de una corrección profunda”, consideró.
La entidad más optimista con el valor gallego es Citi, que incrementó su precio objetivo desde 54 hasta 63 euros, mientras que otras casas como Berenberg lo revisaron de 52 a 62 euros y Santander lo elevó de 55 a 58,4 euros.











