Las empresas de pequeño y mediano tamaño de Iberoamérica, conocidas como mipymes, han experimentado un desarrollo más notable en áreas de formación y digitalización en comparación con la reducción de la burocracia o mejoras en sostenibilidad en los últimos dos años. Este análisis se extrae del informe de seguimiento de los acuerdos de Medellín, coincidiendo con la edición previa del Foro Iberoamericano de la mipyme.
Según la evaluación, que oscila entre 0 y 5, la formación y capacitación humana alcanzan una puntuación de 4,24, mientras que la digitalización y la adopción de nuevas tecnologías obtienen un 3,90. Estos aspectos son los que más progreso han demostrado según los empresarios.
Por otro lado, la valoración del progreso en comercio exterior o internacionalización alcanza los 3,52 puntos. En contraste, la simplificación de normativas y tributación, así como los esfuerzos en sostenibilidad y transición ecológica, se quedan atrás con puntuaciones de 3,38 y 3,29 respectivamente.
Estas conclusiones provienen de una evaluación realizada por el sector privado iberoamericano antes de las sesiones del foro actual en Tenerife, utilizando encuestas de organizaciones empresariales del Consejo de Empresarios Iberoamericanos-CEIB y la Federación Iberoamericana de Jóvenes Empresarios-FIJE, representando a más de 33 millones de empresas en la región.
“Los resultados muestran que la ejecución más intensa se concentra en formación y capacitación y en digitalización aplicada, seguidas por comercio exterior e internacionalización. La incidencia para simplificar marcos normativos y la prioridad explícita de sostenibilidad aparecen como frentes activos, aunque con una intensidad algo menor y más desigual”, explicó Narciso Casado, secretario permanente de CEIB-Consejo de Empresarios Iberoamericanos y Director de Relaciones con Iberoamérica de CEOE.
LA CEIB PRESENTA EL ESTADO DE LAS MIPYMES EN AMÉRICA LATINA Y CARIBE
La CEIB ha presentado recientemente un estudio sobre las mipymes en América Latina y Caribe, elaborado por el Instituto de Estudios Económicos. El informe destaca que, con un entorno adecuado, estas empresas son cruciales para la transformación estructural de las economías de la región. Se proponen ocho líneas estratégicas para una nueva política pública, incluyendo fortalecimiento institucional, simplificación regulatoria, monitoreo y evaluación, y acceso a financiamiento y educación financiera.
Además, se busca promover la digitalización, la integración regional, la igualdad de género y la sostenibilidad ambiental, así como fomentar la colaboración entre el sector público y privado. Según el informe, ‘la agenda de apoyo a las mipymes debe articularse de manera integral y basada en evidencia, promoviendo su resiliencia productiva, su incorporación a la transformación digital y verde, y su plena inclusión en los mercados, con el fin de fortalecer su competitividad sistémica y contribuir a un desarrollo económico sostenible e inclusivo’.











