La empresa constructora OHLA ha concluido su vínculo con Moody’s en cuanto al análisis de su calificación crediticia para la emisión de deuda a largo plazo. Esta decisión se produce justo después de que Fitch, otra reconocida agencia de calificación, haya elevado la nota de OHLA.
Este martes, Moody’s ha informado que ha eliminado su calificación de ‘Caa1’ con perspectiva ‘estable’, asignada a OHLA en junio pasado, junto con la calificación de ‘Caa1-PD’ sobre la probabilidad de incumplimiento y la de sus bonos corporativos sénior.
A principios de octubre, Fitch Ratings reanudó su cobertura sobre OHLA, otorgándole una calificación de ‘B-‘ con perspectiva ‘estable’. Esta evaluación se dio tras observar una mejora en la estructura financiera de la compañía y un “sólido perfil” en sus negocios, lo cual representa una mejora respecto a la última calificación de Moody’s.
Además, Fitch ha destacado la continuación de OHLA en la reducción de su deuda y la ampliación de los plazos de vencimiento principales, junto con un rendimiento operativo “saludable” que incluye mejoras en los márgenes de rentabilidad y flujos de caja positivos.
OHLA ha logrado reducir su ratio de deuda sobre el resultado bruto de explotación (Ebitda) de cinco a tres veces, gracias al repago de deuda y en anticipación a la generación de fondos adicionales por medio de iniciativas como la venta del proyecto de hotel y galería comercial de lujo Canalejas en Madrid.
Fitch anticipa un flujo de caja libre positivo para OHLA entre 2025 y 2028, apoyado por mejoras en la rentabilidad operativa y por una cartera de pedidos “sólida y diversificada”, que se centra en proyectos de hasta 300 millones de euros.