El director ejecutivo de Glovo, Óscar Pierre, anticipa que la compañía podría implementar robots «terrestres o aéreos» para la distribución de sus productos en un lapso de cinco a diez años.
Durante su intervención en el foro ‘World in Progress’ este martes, Pierre detalló que además espera que Glovo expanda su mercado a nuevos sectores, destacando que actualmente, el 80% de los encargos que maneja son de alimentos.
Además, mencionó que la empresa está en proceso de electrificar su flota, inclinándose principalmente hacia las bicicletas eléctricas, que considera son el medio más efectivo para las entregas.
Pierre también comentó sobre la incorporación de inteligencia artificial para automatizar procesos manuales tales como la gestión de incidencias o la actualización de fotografías y precios, lo que, según explica, contribuye a una operación más ágil y a la prestación de «un servicio más eficiente».
APETITO POR EL RIESGO
El CEO de Glovo observó que el apetito por el riesgo ha disminuido con el tiempo, describiéndolo como un cambio «natural». Según Pierre, en los comienzos, Glovo tenía «todo por ganar».
Con el tiempo, según explica, al convertirse en un negocio establecido con inversores y clientes, la disposición al riesgo comenzó a reducirse. Además, destacó que la rápida expansión inicial de la empresa tuvo sus desafíos, incluyendo retiros de mercados como el francés y el brasileño. Esto ha llevado a lo que Pierre define como el «gran principio de la empresa»: continuar innovando, pero también saber cerrar rápidamente aquello que no funciona.