Este miércoles 20 de agosto, parientes de víctimas de accidentes aéreos en España han homenajeado a los fallecidos en estas catástrofes, exigiendo memoria, respeto y un incremento en las medidas de protección de la seguridad aérea, en el marco del primer Día Nacional de las Víctimas de Accidentes Aéreos y sus Familias.
Este día de recordación fue establecido por el Gobierno el 20 de agosto en honor al aniversario del siniestro del vuelo JK5022 de Spanair, que se precipitó hace 17 años en Barajas en su ruta hacia Gran Canaria, cobrando la vida de 154 personas.
En la ceremonia llevada a cabo en el aeropuerto de Madrid participaron familiares de los afectados en este incidente, así como de otros sucesos trágicos como el del Monte Oiz de Iberia en 1985; el de Swiftair en Mali en 2015, donde perecieron seis tripulantes españoles; y el vuelo 9525 de Germanwings que, tras despegar de Barcelona, fue estrellado deliberadamente por uno de los pilotos en los Alpes franceses.
Pilar Vera, presidenta de la Asociación de Víctimas del Accidente JK5022 de Spanair, manifestó que desde el accidente y la creación de la asociación, su «obsesión» ha sido «trabajar por una seguridad aérea preventiva real y verdaderamente comprometida» por las personas, «por encima de los intereses materiales que son sustituibles a la vida humana».
Vera también señaló que las tragedias «ocurrirán sin lugar a duda» y que es crucial «estar preparados para afrontarlas con empatía y humanidad». Enfatizó su frustración ante las dificultades encontradas en su lucha por dar visibilidad a estas tragedias aéreas, pero se congratuló de que en 17 años, la AVJK5022 se haya convertido en un «faro que alumbra en la oscuridad de muchas otras personas a nivel nacional e internacional», siendo ahora una «referencia» para garantizar que la seguridad aérea «ya no podrá dejar a las familias de las víctimas en las tinieblas de la soledad». Finalizó su discurso diciendo: «Por todos los fallecidos en tragedias aéreas en cualquier lugar del mundo, que están en algún lugar siempre en nuestros corazones».