SoftBank, el gigante japonés, ha confirmado una inversión de 2.000 millones de dólares en Intel Corporation para adquirir acciones ordinarias del conocido fabricante de microprocesadores de EE. UU.
Conforme a los detalles del acuerdo, SoftBank abonará 23 dólares por cada título de Intel, un valor algo menor a los 23,66 dólares al cierre del lunes.
Este movimiento sitúa a SoftBank, propietario de Arm y con participaciones en empresas como Nvidia y TSMC, en una posición ventajosa dentro del sector tecnológico, en un período dominado por avances en IA, computación en la nube y nuevas infraestructuras.
En un comunicado conjunto, ambas corporaciones subrayaron que el acuerdo llega en un momento clave para fortalecer sus apuestas por la innovación y la tecnología de semiconductores en el territorio estadounidense.
Declaraciones de los ejecutivos
«Esta inversión estratégica refleja nuestra convicción de que la fabricación y el suministro de semiconductores avanzados se expandirán aún más en Estados Unidos, donde Intel desempeñará un papel fundamental», declaró Masayoshi Son, presidente y CEO de SoftBank Group.
Por su parte, Lip-Bu Tan, CEO de Intel, manifestó su entusiasmo por intensificar la colaboración con SoftBank, enfatizando que la empresa japonesa es un aliado clave en el impulso del liderazgo tecnológico y manufacturero en EE. UU. «Masa y yo hemos colaborado estrechamente durante décadas, y agradezco la confianza que ha depositado en Intel con esta inversión», agregó.
La noticia de este acuerdo surge justo cuando circulan especulaciones sobre una posible adquisición del 10% de Intel por parte del Gobierno estadounidense, utilizando para ello las subvenciones de la Ley CHIPS y Ciencia promulgada por el expresidente Biden.
Recientemente, el presidente Donald Trump señaló a Intel por supuestos vínculos con China, aunque después de una reunión «muy interesante» con Lip-Bu Tan la semana pasada, reconoció su disposición a colaborar con el Gobierno para reforzar el liderazgo tecnológico y manufacturero del país.
Lip-Bu Tan asumió la dirección de Intel en marzo pasado y volvió a formar parte de su junta directiva, de la que había renunciado en agosto de 2024.