Este lunes, 17 de noviembre, Telefónica tiene programada una reunión con los principales sindicatos (UGT, CCOO y Sumados-Fetico) para discutir los detalles del nuevo plan estratégico y, en particular, el expediente de regulación de empleo (ERE) que podría afectar aproximadamente a 6.000 empleados de la empresa.
Se espera que el proceso de despido colectivo priorice la voluntariedad en las bajas y se extienda no solo a las empresas bajo el Convenio de Empresas Vinculadas (Telefónica de España, Móviles y Soluciones), sino también a Movistar+, Telefónica S.A., Telefónica Global Solutions y Telefónica Innovación Digital.
Aunque las cifras específicas aún no se han revelado, se anticipa que Telefónica proponga una reducción de plantilla de unas 6.000 personas, aunque este número podría disminuir a medida que continúen las negociaciones con los sindicatos.
El nuevo plan estratégico de la compañía contempla un ahorro de costes de aproximadamente 3.000 millones de euros para 2030, de los cuales 2.300 millones de euros serán para 2028. Estos ahorros incluyen una significativa reducción de ‘opex’, que abarca los costes laborales. Emilio Gayo, consejero delegado de Telefónica, señaló: ‘En los números que hemos dado de los 2.300 millones (de euros de ahorros) en el 2028, de los cuales casi el 75% son ‘opex’, hemos incorporado todos aquellos ahorros que creemos factibles hacer. Cuando digo todos, son todos (…) Respecto a la pregunta concreta (sobre un posible ERE), si en esos ahorros hay incluidos temas que tienen que ver con personas, lo que podemos decir es que lo haremos siempre de la mano de los representantes de los trabajadores’.
La notificación del ERE a los sindicatos se alinea con los tiempos para lograr un acuerdo antes del cierre del ejercicio fiscal actual, evitando impactos en las cuentas de 2026.
Recientemente, tras las elecciones sindicales en Telefónica Soluciones, los sindicatos anticiparon esta comunicación. Además, en octubre, Telefónica y los sindicatos establecieron el primer ‘marco social’ del grupo, orientado a unificar derechos y compromisos de todos los empleados en España, promoviendo la igualdad y el desarrollo profesional en medio de cambios tecnológicos y organizativos significativos.
El último ERE llevado a cabo por Telefónica finalizó con la salida de 3.420 trabajadores, un 33% menos de lo inicialmente propuesto, y el coste del despido colectivo ascendió a unos 1.300 millones de euros, con un ahorro anual estimado en 285 millones de euros.











