Este martes, el Tesoro Público de España ha logrado captar 5.028,4 millones de euros en una subasta de letras, cifra que se sitúa dentro del margen medio anticipado. En esta ocasión, se ha incrementado la rentabilidad para las letras a seis meses, mientras que el interés para las de doce meses ha sido reducido, aunque sigue superando el 2%, de acuerdo a la información proporcionada por el Banco de España.
Esta subasta se ha llevado a cabo tras la reciente resolución del Banco Central Europeo (BCE) de mantener estables los tipos de interés en el 2%. Como anticipaban los mercados, el BCE ha decidido mantener su posición, tras concluir en junio el ciclo de flexibilización que redujo el costo del dinero en 200 puntos básicos a través de ocho ajustes descendentes, siete de ellos consecutivos.
En este marco, la demanda recibida para esta primera subasta de noviembre fue de 8.229,2 millones de euros, casi duplicando lo finalmente adjudicado. El Tesoro asignó 1.428,39 millones de euros en letras a seis meses, con un interés marginal que alcanzó el 1,962%, ligeramente superior al 1,958% de la subasta anterior. Para las letras a doce meses, se adjudicaron 3.600 millones de euros, con una demanda que superaba los 5.399 millones, y la rentabilidad marginal se ajustó a la baja, de un 2,021% a un 2,003%.
Próximas subastas y objetivos de financiación
Después de esta emisión, el Tesoro volverá al mercado el jueves 6 de noviembre con una subasta de obligaciones del Estado, esperando colocar entre 4.250 millones y 5.750 millones de euros. Se emitirán distintos tipos de obligaciones, incluyendo algunas indexadas a la inflación de la zona euro y otras a largo plazo, con tipos de interés marginal de referencia variando según el tipo y la duración de la obligación.
Hacia finales de septiembre, el Tesoro anunció una reducción en sus necesidades de financiación para este año debido a la robustez del crecimiento económico de España, ajustando su programa de emisión neta de deuda de 60.000 millones a 55.000 millones de euros. El coste medio de la deuda en circulación se ubica en el 2,28%, reflejando una estabilidad en la carga financiera sobre el PIB, manteniéndose cerca de mínimos históricos y lejos de los máximos anteriores.
















