La Unión de Uniones de Agricultores y Ganaderos ha expresado su preocupación por los devastadores incendios que han afectado a España durante el verano, acusando a las administraciones de provocar el descuido del medio rural, como se menciona en un reciente comunicado.
Según la entidad, que ha observado los peores registros de áreas quemadas en las últimas dos décadas, se ha evidenciado el abandono de los montes y zonas rurales, exacerbado por la creciente despoblación debido a la falta de servicios y la baja rentabilidad de las actividades primarias, esenciales para la estructura del territorio.
Antes, a las primeras chispas, había gente que daba la voz de alarma en los pueblos, ahora esto no sucede, han destacado desde la organización.
En medio de esta crisis, que ha obligado a evacuar a más de 30.000 personas, la Unión de Uniones ha extendido su solidaridad a los afectados, incluyendo a los cuatro fallecidos, así como a los agricultores y ganaderos que luchan por proteger sus localidades y a los equipos de extinción de incendios.
Hasta el 12 de agosto, según el Ministerio para la Transición Ecológica, se han quemado 138,000 hectáreas, cantidad que el satélite Copernicus eleva a más de 340,000 hectáreas, afectando áreas de gran valor en biodiversidad y fundamentales para la conservación de ecosistemas.
No podemos hacer nada, directamente, contra estas olas de calor, pero sí podemos prepararnos para ellas, con prevención, limpieza y un modelo forestal acorde con las distintas realidades, han indicado.
Por ello, la organización subraya la necesidad de mantener los montes cuidados durante todo el año y recalca que la combinación de biomasa acumulada, altas temperaturas y vientos fuertes constituyen un cóctel fulminante para los incendios actuales.
La entidad también ha solicitado una revisión de las normativas de gestión forestal, tanto las actuales como las futuras, para que reflejen la realidad del medio rural en las políticas de gestión y en los cultivos promovidos.
A través de sus filiales regionales, Unión de Uniones propondrá encuentros con las comunidades autónomas y con el Miteco a nivel nacional para discutir medidas que prevengan la repetición de estos eventos el próximo verano.















