Vodafone España ha informado a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) sobre la adquisición del control sobre la compañía alicantina Finetwork, tal como consta en los registros de la institución que lidera Cani Fernández.
La notificación, efectuada el pasado 25 de septiembre, da inicio al primer periodo de evaluación de la transacción, durante el cual la CNMC tiene un mes para emitir un pronunciamiento.
Si se necesitase un análisis más exhaustivo, el proceso avanzaría a una segunda etapa, que podría extenderse entre tres y cuatro meses.
A principios de este mes, el Juzgado de lo Mercantil número 1 de Alicante avaló el plan de reestructuración propuesto por Vodafone España para Finetwork, derivado de los impagos acumulados por esta última. Este respaldo judicial implica que la teleco, propiedad del fondo de inversión británico Zegona, pasará a controlar la operadora alicantina.
El plan de reestructuración de Vodafone España incluye varias medidas estructurales que afectan tanto a la composición como al capital de Wewi Mobile, la matriz de Finetwork. Entre estas medidas, se destaca un aumento de capital social a través de la compensación de créditos por un total de 50 millones de euros, destinados a capitalizar parte de la deuda que Finetwork mantiene con Vodafone, mediante la emisión de nuevas participaciones a favor de esta última.
La segunda medida es la sustitución del actual consejo de administración de Wewi Mobile y la designación de un nuevo consejo de tres miembros por parte de Vodafone, una vez realizado el aumento de capital.
El fallo del juzgado señala que la “cuestión más controvertida” del plan se refiere a las cláusulas suspensivas y las autorizaciones administrativas necesarias, específicamente de la CNMC y de la Junta de Inversiones Exteriores, debido a que Zegona es una firma británica y Vodafone opera en un sector estratégico como es el de las telecomunicaciones.
Las autorizaciones de la CNMC y de la Junta de Inversiones Exteriores son condición suspensiva para la ejecución del aumento de capital, tal como menciona la sentencia: “El plan prevé expresamente que dichas autorizaciones son condición suspensiva para la ejecución de la ampliación de capital. De no cumplirse a tiempo, el propio plan contempla su resolución automática. Es decir, el plan quedaría sin efecto si al 31 de diciembre de 2025 no se han obtenido las aprobaciones de competencia e inversión extranjera, salvo prórroga acordada”.
Además, el plan de Vodafone incluye una línea de financiación adicional de hasta 20 millones de euros.
Si Vodafone España finalmente toma el control de Finetwork, que posee cerca de un millón de servicios activos, podría integrarla en su estructura operativa o bien optar por venderla. En este último escenario, cabe recordar que en julio pasado, el fondo español Asterion Industrial Partners expresó su interés por comprar la teleco alicantina, según informó Finetwork a su equipo en un comunicado interno.