El Parlamento Vasco ha decidido no aprobar una propuesta de ley contra el racismo y la xenofobia que fue presentada por Sumar, con el objetivo de ‘contribuir a la corrección de las desigualdades reales’ y ‘redoblar la ofensiva frente a la extrema derecha’. Los partidos PNV, PSE, PP y Vox votaron en contra, mientras que EH Bildu y Sumar apoyaron la iniciativa en la sesión plenaria.
Jon Hernández, parlamentario de Sumar, defendió la propuesta destacando que busca ‘contribuir a la corrección de las desigualdades reales’ y ‘redoblar la ofensiva frente a los planteamientos de la extrema derecha’, pues ‘cada vacío legal y cada gesto de complacencia es aprovechado por quienes pretenden hacer del odio un proyecto político’.
La ley propuesta, según Hernández, tendría como objetivo central ‘garantizar la inclusión plena, la participación efectiva y el ejercicio real de los derechos fundamentales de las personas racializadas en todos los ámbitos de la vida social, política, cultural y económica de Euskadi’. Además, Sumar solicitó que se reconozca el racismo como un fenómeno social y se adopten medidas para corregir desigualdades históricas.
Hernández también señaló que casi el 10% de la población de Euskadi es extranjera y mencionó la discriminación estructural que sufre el pueblo gitano en la región. Por su parte, Diana Urrea de EH Bildu expresó su apoyo a la normativa como un avance en los derechos de las personas migrantes.
En contraste, Aitor Urrutia del PNV mencionó que la negativa a la propuesta busca abrir una ‘puerta más amplia’ con un proyecto más integral contra la discriminación que el Gobierno Vasco planea presentar. Patricia Campelo del PSE y Laura Garrido del PP criticaron la limitación de la propuesta al centrarse solo en cuestiones de etnia y raza. Amaia Martínez de Vox criticó la propuesta por considerarla parte de una ‘obsesión de la ultraizquierda por sobreregular’.