Los días 7 y 8 de octubre, el Parlament será el escenario del Debate de Política General, donde la presidenta del Govern, Marga Prohens, de la formación ‘popular’, abordará por segunda vez temas clave como la vivienda, la saturación turística y la inmigración, además de abarcar cuestiones como la vehicularidad del castellano, la movilidad, el medioambiente y los servicios públicos.
La sesión plenaria arrancará el martes 7 a las 10:30 horas con una intervención de Prohens que no excederá los 90 minutos. Durante su discurso, se espera que Prohens destaque aspectos como la vivienda, la saturación turística y la inmigración, aunque no se han proporcionado detalles sobre posibles anuncios.
Al día siguiente, los grupos políticos tendrán oportunidad de participar en el pleno. El PP, partido de Prohens, cerrará las intervenciones. Cada grupo dispone de un máximo de 30 minutos para exponer su posición, y la presidenta contará con un turno de réplica.
VIVIENDA, SATURACIÓN E INMIGRACIÓN, LOS TRES GRANDES EJES DEL DEBATE
Antoni Costa, vicepresidente del Govern y conseller de Economía, Hacienda e Innovación, destacó la importancia de abordar la vivienda, la saturación turística y la inmigración en el Parlament, calificándolos como los temas más preocupantes para la ciudadanía y prioritarios para el Govern. Costa señaló el problema de la vivienda como ‘un gran problema’ y reafirmó la constante llegada de pateras sin soluciones efectivas en el horizonte.
Por otro lado, Sebastià Sagreras, portavoz del PP en el Parlament, resaltó los esfuerzos de Prohens para resolver los principales problemas de Baleares, heredados tras ocho años de gestión socialista, destacando el acceso a la vivienda y el equilibrio entre turismo y bienestar de los residentes.
Vox, por su parte, propondrá deportaciones masivas y defenderá la vehicularidad del castellano en la educación, mientras que el PSIB-PSOE se presentará como alternativa al actual Govern. MÉS per Mallorca, a su vez, se centrará en políticas de vivienda y decrecimiento turístico.
El debate se celebra en un momento de creciente distancia entre PP y Vox, especialmente después de que Vox rechazara un decreto clave para el Govern, aunque aseguran seguir dispuestos a dialogar para mantener la legislatura activa.