En el reciente juicio, los implicados en el acoso online hacia Brigitte Marcon, la primera dama de Francia, han justificado sus acciones ante el tribunal, argumentando que estos actos constituyen una expresión de libertad y que solo buscaban hacer humor mediante la sátira. Este caso ha sido interpretado por los acusados como un mero ejercicio de “humor” y “sátira”.
Al llegar a los juzgados, la mayoría de los diez implicados fueron recibidos por una multitud que los aclamaba como héroes. Entre los acusados más conocidos se encuentra Aurélien Poirson Atlan, alias ‘Zoe Sagan’, y el galerista Bertrand Scholler, quien posee un amplio seguimiento en la red social X y promueve teorías conspirativas.
Los acusados han manifestado que “no han cometido ciberbullying”, sino que han ejercido su “libertad de expresión”. Han negado que su intención fuera atacar directamente a Brigitte Macron y han señalado que ella “ni siquiera tiene cuenta en X”. “Nuestros tuits simplemente son una forma de humor, dotado de espíritu satírico”, se ha informado en ‘Le Figaro’.
En este marco, se ha mencionado el “espíritu de Charlie” en alusión a la revista satírica Charlie Hebdó, víctima de un atentado terrorista en 2015. Uno de los acusados planteó: “¿Acaso hace falta ahora un permiso para hacer humor en Francia? Si no se puede, entonces hay que eliminar X”.
El caso de ciberacoso está vinculado a una teoría de la conspiración que sugiere que Brigitte Macron es transexual, nacida con genitales masculinos, y ha sido objeto de acusaciones de pedofilia, entre otras cosas.
CONSECUENCIAS PARA LA SALUD
Tiphaine Auziére, hija de Brigitte Macron, declaró ante el tribunal que la salud de su madre se ha visto afectada por el “ciberacoso”, especialmente en lo que respecta a ser percibida como transgénero. “Esto la ha llevado a prestar muchísima atención a la ropa que lleva y a las posturas que adopta porque sabe que su imagen va a ser distorsionada”, indicó, según BFM TV. “No pasa un solo día en que la gente no le hable de todo esto y no puede ignorarlo”, añadió.
El juicio está programado para durar dos días, durante los cuales se presentarán las pruebas. Se desconoce cuándo se emitirá el veredicto. Macron presentó la demanda por ciberacoso en agosto de 2024, y los acusados enfrentan hasta dos años de prisión si son hallados culpables.
















