Amnistía Internacional ha exhortado a las fuerzas de seguridad marroquíes a detener el “uso excesivo de la fuerza” contra los manifestantes que reclaman mejoras sociales en el país, tras los altercados que han resultado en varios fallecidos. La organización aboga por una investigación “inmediata” e “independiente” sobre la respuesta policial en las manifestaciones.
En un comunicado, expresaron su preocupación por la creciente evidencia de violencia policial en contra de los manifestantes y peatones. “Las autoridades deben asegurar una investigación transparente sobre estas muertes y aplicar la máxima contención”, afirmaron.
Heba Morayef, directora de Amnistía para Oriente Próximo y el norte de África, enfatizó que la actuación policial debe alinearse con los estándares internacionales y garantizar el derecho a la protesta pacífica. “Nadie debe ser castigado por exigir derechos económicos y sociales o por luchar contra la corrupción”, declaró.
“Bajo el Derecho Internacional, el uso letal de la fuerza por parte de las fuerzas de seguridad está prohibido a menos que sea necesario e inevitable para proteger la vida”, añadió, instando a las autoridades a evitar la violencia. Además, pidió la absolución de los detenidos que solo ejercían su derecho a la asamblea pacífica.
Finalmente, Morayef subrayó la necesidad del Gobierno de atender las demandas legítimas de los jóvenes, incluyendo mejoras en educación y sanidad, empleos dignos, y medidas de transparencia y contra la corrupción. Las manifestaciones, las más concurridas desde las del Rif en 2016-2017, se han extendido por más de una decena de ciudades, impulsadas por los grupos GenZ 212 y Morocco Youth Voice a través de plataformas digitales.