El Ministerio de Defensa de Camboya ha denunciado este sábado que el Ejército tailandés ha vuelto a abrir fuego contra posiciones camboyanas situadas en la frontera común, pese al anuncio realizado por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien había asegurado que en la noche del viernes ambas partes detendrían las hostilidades que se han intensificado en los últimos días.
“Las fuerzas militares tailandesas continuaron disparando contra las fuerzas camboyanas en la Región Militar 5 el 13 de diciembre de 2025, desde las 19.00 horas (hora local) del 12 de diciembre de 2025 hasta las 08.00 horas (hora local) del 13 de diciembre de 2025”, ha indicado el Ministerio camboyano en su cuenta de la red social X.
Según las autoridades de Nom Pen, Bangkok habría llevado a cabo bombardeos sobre la comuna de Thma Da, en el oeste del país, en la provincia de Pursat, utilizando cazas F16 para lanzar hasta siete proyectiles sobre esta localidad. Además, el Gobierno camboyano ha detallado un amplio registro de ataques nocturnos contra aldeas e infraestructuras civiles, que habrían ido en aumento hasta primeras horas de la mañana, alimentando la actual espiral de violencia a lo largo de la línea fronteriza.
Trump había dado por concluida la escalada de tensión poco antes de estos incidentes, tras mantener el viernes una conversación telefónica con los líderes de Tailandia y Camboya para tratar de apuntalar el acuerdo de paz suscrito en octubre en Kuala Lumpur, capital de Malasia.
“Esta mañana tuve una muy buena conversación con el primer ministro de Tailandia, Anutin Charnvirakul, y el de Camboya, Hun Manet, sobre el lamentable resurgimiento de su prolongada guerra. Han acordado cesar todos los disparos a partir de esta noche y volver al acuerdo de paz original firmado conmigo, (y) con la ayuda del gran primer ministro de Malasia, Anwar Ibrahim”, declaró Trump.
No obstante, al poco tiempo de esa llamada, el propio primer ministro tailandés explicó ante los medios que había “explicado” al presidente estadounidense que Bangkok no tenía “otra opción que defender las vidas de su gente” porque “de lo contrario, (Trump) habría malinterpretado que (empezamos) a atacar a Camboya”, según declaraciones recogidas por el diario ‘Bangkok Post’.
“A veces hay que responder para que escuchen y se den cuenta de que no pueden hacernos esto. No somos un país donde se pueda hacer lo que se quiera”, ha aseverado Charnvirakul.
En este contexto, el dirigente tailandés decidió este viernes disolver el Parlamento y adelantar las elecciones generales con el objetivo de “devolver el poder al pueblo”, cumpliendo así la promesa formulada cuando asumió el cargo en septiembre, tras la destitución de Paetongtarn Shinawatra por sus críticas al Ejército durante una conversación con el ex primer ministro camboyano Hun Sen. Charnvirakul se había comprometido a convocar a las urnas en un plazo máximo de cuatro meses, pese a que el país se encuentra inmerso en un repunte del conflicto con su vecino.
Los últimos choques armados en la zona fronteriza han dejado ya más de una veintena de fallecidos y han provocado el desplazamiento de más de medio millón de personas en ambos lados de la frontera. La actual oleada de ataques se inició el lunes, cuando Tailandia respondió contra posiciones camboyanas tras denunciar la muerte de uno de sus soldados a manos de tropas del país vecino.











