Una corte en Seúl ha dictado el miércoles una nueva orden de detención para el expresidente Yoon Suk Yeol, relacionada con su intento fallido de aplicar la ley marcial en diciembre del año anterior, medida que fue anulada por el Parlamento tras varias manifestaciones ciudadanas.
El juez Nam Se Jin del Tribunal del Distrito Central de Seúl ha sido el encargado de emitir la orden, motivado por el riesgo de que Yoon pueda interferir con las pruebas de la investigación en curso, informó Yonhap.
Esta acción llega tras la petición del consejo especial, bajo la dirección del fiscal Cho Eun Suk, que continúa investigando al exmandatario y ha solicitado su arresto nuevamente por abuso de autoridad, alteración de documentos oficiales y entorpecimiento de operaciones gubernamentales durante la corta vigencia de la ley marcial.
El consejo especial ha acusado a Yoon de ordenar la eliminación de datos de teléfonos secretos de varios participantes en el evento político, incluyendo al excomandante Kwak Jong Geun y al destituido oficial de defensa de Seúl, Lee Jin Woo.
Además, se le acusa de hacer lo posible por eludir su primera captura, mientras que la acusación de falsificación se relaciona con la creación de un documento ficticio de ley marcial que buscaba darle legitimidad a sus actos.
El Tribunal del Distrito Central de Seúl ordenó la liberación de Yoon en marzo, tras una primera orden de arresto emitida en enero, cuando aún ejercía su mandato. Posteriormente, el Tribunal Constitucional confirmó su ‘impeachment’ a principios de abril.
El jueves anterior, el Parlamento de Corea del Sur aprobó una ley que limita la aplicación de la ley marcial, con el objetivo de prevenir incidentes como el ocurrido el 3 de diciembre, cuando el Ejército tomó las calles y bloqueó temporalmente los accesos al Parlamento.














