El gobierno de Estados Unidos y el de China han comunicado este inicio de semana que extenderán por 90 días adicionales la pausa en la imposición de ciertos aranceles que ambos países se aplican mutuamente. Este acuerdo se alcanzó tras un encuentro entre representantes de ambas naciones en Estocolmo, Suecia, los días 28 y 29 de julio.
«Acabo de firmar una orden ejecutiva que prorrogará la suspensión arancelaria a China durante otros 90 días. El resto de elementos del acuerdo permanecerán sin cambios», declaró el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, a través de la red social Truth Social, señalando que la nueva fecha límite es el 10 de noviembre.
Además, en una declaración conjunta, los dos gobiernos, que son las mayores economías del planeta, expusieron los detalles de este pacto. El encuentro en Suecia contó con la participación del viceprimer ministro chino, He Lifeng, y por parte estadounidense, el secretario del Tesoro, Scott Bessent, y el representante de Comercio, Jamieson Greer.
Las condiciones de esta prórroga mantienen los mismos términos que en la suspensión inicial del 12 de mayo, también de 90 días, estableciendo un 30 por ciento en los aranceles sobre las importaciones chinas en Estados Unidos y un 10 por ciento en los gravámenes sobre los productos estadounidenses en China. Anteriormente, las tarifas anunciadas alcanzaban el 145 y 125 por ciento, respectivamente.