Un gobernador con ambición presidencial
El gobernador de California, Gavin Newsom (58 años), ha confirmado que decidirá después de las elecciones legislativas de 2026 si da el paso de competir por la presidencia de Estados Unidos en 2028.
En una entrevista con CBS News, Newsom reconoció que “no sería honesto negar que lo estoy considerando seriamente”.
Su mandato en California termina en enero de 2027, justo antes del inicio del próximo ciclo electoral, lo que le dejaría libre para una campaña nacional.
Desde la renuncia de Joe Biden a la reelección y la derrota de Kamala Harris frente a Donald Trump en 2024, el Partido Demócrata busca un liderazgo capaz de unir a las dos almas del partido: la tradicional y la progresista. Newsom aparece como uno de los pocos con peso, visibilidad y financiación suficientes para hacerlo.
De San Francisco a líder nacional
Nacido en San Francisco en 1967, Gavin Christopher Newsom inició su carrera política como alcalde de su ciudad (2004–2011), donde se convirtió en símbolo de la apertura social al autorizar los primeros matrimonios entre personas del mismo sexo en California.
Posteriormente fue vicegobernador (2011–2019) y, desde 2019, ocupa el cargo de gobernador del estado más poblado del país.
En 2021 sobrevivió a un intento de destitución (“recall”) impulsado por sectores conservadores, que superó con un 61,9 % de apoyo, consolidando su poder.
En 2022 logró la reelección con más del 60 % de los votos, un resultado que le colocó como una de las figuras más fuertes del Partido Demócrata.
Las políticas que definen su mandato
- Moratoria a la pena de muerte: en 2019 decretó la suspensión de todas las ejecuciones en California, cerrando la cámara de gas de San Quentin. La medida fue celebrada por organizaciones de derechos humanos y criticada por el bloque republicano.
- Lucha contra el sinhogarismo: ha impulsado el programa CARE Court, que permite a los tribunales ordenar tratamientos de salud mental y alojamiento supervisado para personas sin hogar con trastornos graves. Su aplicación se amplió en 2025 y ha generado debate por su componente coercitivo. Organizaciones de derechos civiles y colectivos de personas sin hogar han criticado el programa por su carácter coercitivo: temen que acabe forzando tratamientos psiquiátricos o decisiones judiciales sobre individuos que no han cometido delitos.
- Salario mínimo sectorial: bajo su mandato, California elevó el salario mínimo en el sector de la comida rápida a 20 dólares por hora, convirtiéndose en el primero del país en aplicar esta medida. Su objetivo: trasladar la política social a los sectores con más precariedad laboral.
- Agenda climática global: Newsom ha convertido a California en un referente internacional en política medioambiental.
En 2023 viajó a China y se reunió con Xi Jinping para reforzar la cooperación en energías limpias, movilidad eléctrica y reducción de emisiones.
También impulsó una ley para prohibir la venta de coches nuevos de gasolina a partir de 2035.
Un rival directo de Trump y la derecha nacional
Bajo las presidencias de Donald Trump, Newsom se ha consolidado como uno de sus principales contrapesos. Desde su despacho en Sacramento, ha desafiado repetidamente las órdenes federales en materia migratoria y medioambiental, ganando visibilidad en el tablero nacional.
Su enfrentamiento con el gobernador de Florida, Ron DeSantis, con quien protagonizó un debate televisado en 2023, reforzó su imagen de demócrata combativo y mediático.
Desde entonces, se le considera el rostro más mediático del ala progresista moderada del partido.
Sus retos para 2028
Pese a su popularidad, Newsom arrastra algunos puntos débiles.
El alto coste de la vivienda, la crisis del sinhogarismo y el déficit presupuestario de California son frentes que deberá justificar si aspira a escalar a la presidencia.
También afronta críticas por su estilo personalista y su uso intensivo de la imagen en redes sociales.
Aun así, encuestas internas y sondeos publicados por medios estadounidenses lo sitúan entre los tres candidatos demócratas con mejor valoración nacional, junto a Andy Beshear (Kentucky) y Josh Shapiro (Pensilvania).
Qué dicen las encuestas y el calendario
Aunque faltan tres años para los comicios, Newsom figura ya en el radar de los principales donantes del Partido Demócrata y en la lista de favoritos para las primarias de 2028.
Según sondeos recientes de Morning Consult y The Hill, su nivel de popularidad y conocimiento entre los votantes Demócratas no deja de subir y su popularidad dentro del partido ha crecido notablemente tras el giro en redes sociales, dando la batalla a Donald Trump, imitando su estilo y narrativas, pero desde el prisma progresista.
El gobernador ha estado en el centro de la atención por su intensa actividad en redes sociales, donde frecuentemente ha satirizado al presidente Trump.
Esta exposición ha fortalecido su posición, especialmente tras la controversial movilización de la Guardia Nacional en Los Ángeles por parte de Trump, medida que fue posteriormente bloqueada judicialmente.
Tras la renuncia de Joe Biden a buscar la reelección en julio de 2024, los demócratas han estado buscando un candidato adecuado.
Kamala Harris, designada sucesora por Biden, enfrentó a Trump recientemente en las urnas, logrando 226 votos electorales frente a los 312 de Trump, en una elección donde se requieren 270 para ganar.
División entre Demócratas tradicionales y progresistas
El partido demócrata experimenta ahora una división interna entre sus figuras tradicionales y un emergente sector progresista que ha ganado terreno, como lo demuestra Zohran Mamdani en Nueva York.
Newsom, alineado más con el liberalismo de la costa oeste, ha sido notorio por sus políticas locales contundentes, incluyendo su plan para desalojar los campamentos de personas sin hogar en Los Ángeles.
Entre los posibles candidatos demócratas están también J. B. Pritzker, Andy Beshear y Josh Shapiro, mientras que JD Vance parece ser la apuesta republicana.















