El mandatario colombiano, Gustavo Petro, ha convocado con carácter de urgencia a los delegados del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) en Colombia este viernes, para que expliquen la emisión de supuestos créditos destinados a influir en el proceso electoral, en un momento de alta tensión diplomática con Estados Unidos.
“Tenemos que ir con todo el estamento financiero, y debe venir el delegado de Colombia ante la junta del banco, no sé cómo se llama, la junta de gobernadores del BID, para que nos explique por qué quieren violar la Constitución”, declaró Petro en un acto público en Cali, suroeste del país.
En este sentido, el presidente ha apuntado directamente a la administración estadounidense, acusando al secretario de Estado, Marco Rubio, de intentar influir en las elecciones colombianas. “Miren como quiere Marco Rubio incidir en nuestras elecciones, no les basta tratarme como narcotraficante”, criticó Petro.
Además, sugirió que el propósito de Estados Unidos sería “comprar los votos de los pobres en Colombia”, calificando esta maniobra como un “golpe de Estado” e insistiendo en que la constitución colombiana prohíbe la intervención de dinero extranjero en las elecciones. “Señores, todos los alcaldes que estaban en esa reunión empezaron a ofrecer instituciones para recibir decenas de millones de dólares del BID sin permiso del Gobierno nacional para que se entregue en créditos destinados a comprar tamales, lechonas, bicicletas, motos, tejas, todo lo que antes se hacía con el dinero del narcotráfico”, explicó, describiendo estas acciones como una nueva forma de manipulación electoral.
Esta acusación se produce en un contexto de creciente crisis entre Colombia y Estados Unidos, agudizada tras más de 20 ataques ordenados por Donald Trump contra supuestas narcolanchas desde septiembre, con un saldo de más de 80 muertos según fuentes oficiales.










