Esta semana ha dado comienzo la contienda por la presidencia de Chile, con ocho aspirantes que buscarán el favor del electorado en los comicios de noviembre. Se espera una marcada polarización, destacando entre los candidatos José Antonio Kast, del Partido Republicano, y Jeannete Jara, de la coalición gobernante.
El lunes, el Servicio Electoral de Chile (Servel) aceptó las ocho candidaturas, entre las cuales Kast y Jara se perfilan como los principales contendientes para suceder a Gabriel Boric. Boric, quien asumió la presidencia en 2021 con un 55,8% de los votos, enfrentó a Kast, que obtuvo un 44,1%. Kast participa nuevamente con un enfoque en la seguridad y el crimen organizado.
De acuerdo con una reciente encuesta de Cadem, Kast lidera la preferencia con un 28%, seguido por Jeannete Jara con un 26%. Evelyn Matthei, exalcaldesa de Providencia y candidata de la coalición Chile Vamos, se sitúa en tercer lugar con el 16% de los apoyos.
Adicionalmente a la elección presidencial, se renovarán la Cámara de Diputados y gran parte del Senado, anticipándose un Parlamento sin mayorías definidas. Durante su mandato, Boric implementó importantes medidas sociales, pero enfrentó dificultades, como la no promulgación de una nueva Constitución, reemplazando la de la era Pinochet.
Un informe de la fundación Ciudadanía Inteligente indica que Boric ha cumplido solo el 38% de sus promesas electorales. La gobernabilidad del próximo gobierno dependerá de la capacidad de alcanzar consensos en un contexto de polarización, según se desprende del inicio oficial de las elecciones esta semana.
Kast, con el eslogan ‘La fuerza del cambio’, promete medidas contra el estancamiento económico y la inseguridad. Jara, por su parte, busca desmarcarse de Boric y centrar su gobierno en el crecimiento económico y la inversión. Matthei y el populista Franco Parisi también son figuras destacadas en esta carrera, junto con candidatos menos populares como Marco Enríquez-Ominami y Eduardo Artés.