En una reciente conversación telefónica, el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, ha instado a su contraparte de Estados Unidos a suprimir los aranceles que afectan hasta el 40 por ciento de las exportaciones brasileñas y a levantar las sanciones impuestas a destacados funcionarios brasileños. Este diálogo, que se extendió por media hora, ha sido descrito por la Presidencia de Brasil como una charla mantenida en un ‘buen tono’, reflejando la positiva interacción que ambos líderes tuvieron previamente en la Asamblea General de Naciones Unidas en Nueva York.
‘Lula ha descrito el encuentro como una oportunidad para restaurar las relaciones amigables de 201 años entre las dos mayores democracias occidentales’, ha comunicado la Presidencia brasileña, destacando que ambos mandatarios han intercambiado sus números personales para asegurar una ‘comunicación directa’. Además, Lula ha recordado a Trump que Brasil es uno de los tres países del G20 con el que Estados Unidos posee un superávit en la balanza de bienes y servicios, reiterando la solicitud de retirar las sanciones y restricciones a importantes figuras como el juez del Supremo, Alexandre de Moraes.
Para finalizar, se ha planteado un futuro encuentro entre ambos líderes, con Lula proponiendo dos posibles ocasiones: la cumbre de ASEAN en Malasia a fines de octubre o la Conferencia de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático en Belén en noviembre. Mientras Trump considera la invitación, Lula ha expresado su disposición para visitar Estados Unidos próximamente.