El mandatario francés, Emmanuel Macron, ha admitido que Francia participó en un conflicto bélico contra fuerzas insurgentes en Camerún, tanto antes como después de que el país africano alcanzara su independencia en 1960, un periodo marcado por la «violencia represiva». Esta declaración fue parte de un comunicado enviado a finales de julio a Paul Biya, presidente de Camerún, y ha sido destacado recientemente por la prensa francesa.
Reconocimiento de los Hechos
«Me corresponde hoy asumir el papel y la responsabilidad de Francia en estos acontecimientos», expresó Macron, refiriéndose a un informe recibido en enero sobre «ciertos episodios específicos de esta guerra, operaciones militares llevadas a cabo bajo mando francés por los cuatro líderes independentistas Isaac Nyobè Pandjock (17 de junio de 1958), Ruben Um Nyobè (13 de septiembre de 1958), Paul Momo (17 de noviembre de 1960) y Jérémie Ndéléné (24 de noviembre de 1960)».
La investigación, realizada por una comisión mixta franco-camerunesa establecida en 2022 por Macron, tenía como fin dilucidar la intervención de París frente a la independencia y los grupos opositores en Camerún entre 1945 y 1971. Esta «demostraba claramente que en Camerún se libró una guerra, durante la cual las autoridades coloniales y el Ejército francés ejercieron múltiples formas de violencia represiva».
En su carta, divulgada por medios como TF1, BFMTV y TV5 Monde, Macron también reconoció que «la guerra continuó más allá de 1960 con el apoyo de Francia a las acciones llevadas a cabo por las autoridades independientes camerunesas».
Finalmente, Macron subrayó ante su homólogo camerunés que el informe y las investigaciones «nos permitirán seguir construyendo el futuro juntos, fortalecer la estrecha relación que une a Francia y Camerún, con sus vínculos humanos entre nuestras sociedades civiles y nuestra juventud».