Los líderes del Grupo de los Ocho Nórdicos Bálticos han expresado su soporte total a Ucrania después del encuentro del viernes entre los presidentes Donald Trump de Estados Unidos y Vladimir Putin de Rusia. Han pedido que se incluya al Gobierno ucraniano en futuras negociaciones, destacando que su integridad territorial es sagrada y que no se debe permitir que Moscú obstaculice su posible adhesión a la OTAN.
El grupo, compuesto por Dinamarca, Estonia, Finlandia, Islandia, Letonia, Lituania, Noruega y Suecia, ha reconocido los intentos de Trump por terminar el conflicto bélico y ha señalado que «para lograr una paz justa y duradera, el siguiente paso debe ser junto a Ucrania».
«Solo Ucrania puede tomar decisiones sobre su futuro. No se pueden tomar decisiones sobre Ucrania sin Ucrania, ni decisiones sobre Europa sin Europa», han afirmado, añadiendo que «la experiencia ha demostrado que no se puede confiar en Putin» y que es deber de Rusia cesar sus «flagrantes violaciones del derecho internacional».
En respuesta a las afirmaciones de Putin sobre el pasado, los países han indicado que las verdaderas causas de la guerra son «la agresión y las ambiciones imperialistas de Rusia» y han enfatizado que «una paz justa y duradera requiere un alto el fuego y garantías de seguridad creíbles para Ucrania».
«Un acuerdo de paz requiere compromisos firmes y concretos de los socios transatlánticos para proteger a Ucrania de cualquier agresión futura», han puntualizado. Frente a la sugerencia de Putin de «desmilitarizar» Ucrania y mantenerla alejada de la OTAN, el grupo se opone firmemente a cualquier «limitación» de las fuerzas armadas ucranianas y advierte a Rusia que «no tiene derecho a veto sobre la vía de adhesión de Ucrania a la UE y la OTAN».
«Mantenemos firme nuestro apoyo inquebrantable a la soberanía, la independencia y la integridad territorial de Ucrania», declararon, exigiendo a Rusia que «devuelva urgentemente a los niños secuestrados de los territorios ocupados, así como a los prisioneros de guerra y civiles».
«Seguiremos armando a Ucrania y reforzando las defensas europeas para disuadir nuevas agresiones rusas mientras Rusia continúe con sus matanzas, y seguiremos reforzando las sanciones y las medidas económicas más amplias para presionar la economía de guerra rusa», concluyeron.