El primer ministro húngaro, Viktor Orbán, ha confirmado este viernes que la cumbre entre los presidentes de Estados Unidos y Rusia, Donald Trump y Vladimir Putin, respectivamente, “sigue en la agenda”, pese a la reciente cancelación anunciada por el presidente estadounidense sobre su encuentro con el líder ruso para tratar la situación en Ucrania.
“La cumbre de paz de Budapest está en la agenda. Los estadounidenses y los rusos están negociando y podrían alcanzar un acuerdo en cualquier momento”, expresó Orbán en una entrevista con la emisora húngara Kossuth, subrayando que “Hungría está a la espera, dado que la conferencia de paz podría celebrarse muy rápidamente en caso de acuerdo”.
Trump ha hecho oficial la suspensión de la reunión planeada con Putin en Hungría, debido a un impasse en las negociaciones para terminar con la invasión rusa en Ucrania y tras las sanciones impuestas por Estados Unidos a dos compañías petroleras rusas. “Cancelamos la reunión con Putin. Simplemente no me pareció bien. No parecía que fuéramos a llegar a donde debíamos, así que la cancelé. Pero la tendremos en el futuro”, declaró Trump.
En este escenario, Orbán ha señalado que la Unión Europea (UE) “no debería estar a la espera de las negociaciones ruso-estadounidense, sino iniciar negociaciones con los rusos”. “Deberíamos hacer exactamente lo que el presidente estadounidense está haciendo”, reportó la agencia estatal húngara de noticias, MTI.
Además, ha defendido que si la UE no desea quedar al margen de las decisiones sobre Europa, debería participar en las negociaciones. Orbán reiteró que “Hungría no quiere verse implicada en la guerra entre Rusia y Ucrania”, iniciada en febrero de 2022 por la orden de invasión firmada por Putin.
“Recomendamos a los ucranianos que prueben con las negociaciones de paz, podemos ayudar con eso. No enviaremos gente, no enviaremos armas, no daremos dinero, pero ayudaremos con gusto iniciando un proceso de negociaciones de paz”, enfatizó Orbán, criticando la postura de la UE durante el conflicto.
Por otro lado, ha advertido de que la posible adhesión de Ucrania a la UE podría involucrar a Hungría en el conflicto. “Se convertiría en nuestra guerra y no queremos eso”, argumentó, añadiendo que la situación en Ucrania está “drenando” fondos necesarios para enfrentar la crisis económica en Europa.
“Hungría no apoya el inicio de negociaciones en la UE sobre la adhesión de Ucrania y no apoya ninguna medida financiera que derive dinero húngaro a Ucrania o la ponga en peligro por su conexión con Ucrania”, concluyó Orbán, destacando que Budapest ha logrado modificaciones en el último paquete de sanciones a Moscú para “sacar todo lo que era malo para Hungría”.














