El presidente nigeriano, Bola Tinubu, ha comunicado este martes que se ha logrado el rescate de 24 alumnas que habían sido secuestradas la semana anterior en el estado de Kebbi, ubicado en el noroeste de Nigeria. Afortunadamente, las estudiantes han vuelto a casa ‘sanas y salvas’, aunque los recientes episodios de secuestros y asaltos han impulsado al mandatario a implementar medidas de vigilancia adicionales en este y otros dos estados.
‘Todas las colegialas secuestradas en el estado de Kebbi han sido rescatadas sanas y salvas’, declaró Tinubu en su perfil de la red social X, donde también ha aprovechado para elogiar a las ‘fuerzas de seguridad por su rápida respuesta, y a los padres y a la comunidad por su fortaleza durante este período’ de cinco días, tiempo durante el cual una de las 25 estudiantes inicialmente capturadas consiguió huir de sus captores.
Este rescate ocurrió un día después de otro secuestro en masa en el estado de Kwara, al oeste del país, donde siete atacantes secuestraron a 17 personas en la localidad de Isapa, según reportes del diario ‘Vanguard’. Ese mismo día, también fueron liberadas 38 personas que habían sido secuestradas cinco días antes durante un ataque a una iglesia en Eruku, donde tres individuos fueron asesinados.
Ante estos eventos, Tinubu ha ordenado reforzar la seguridad en los bosques de Kwara, con ‘la Fuerza Aérea manteniendo vigilancia continua en las zonas más remotas, sincronizando operaciones con unidades terrestres para identificar, aislar, desbaratar y neutralizar eficazmente a todos los elementos hostiles’, según su publicación en X. Además, ha extendido estas medidas de seguridad a los estados de Kebbi y Níger, adyacentes al norte de Kwara.
Esta decisión sucede justo después de que Naciones Unidas instara a Nigeria a ‘adoptar todas las medidas legales posibles’ para detener estos secuestros de estudiantes. Thameen al Kheetan, portavoz de la oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, reveló que ‘al menos 402 personas, en su mayoría estudiantes, han sido secuestradas en los estados de Níger, Kebbi, Kwara y Borno desde el 17 de noviembre’.
El noreste de Nigeria sigue siendo el foco principal de actividades de grupos como Boko Haram y Estado Islámico en África Occidental (ISWA), aunque la inseguridad ha crecido en otras áreas del norte y noroeste, alertando sobre una posible expansión de redes y bandas criminales que afectan a la población civil.











