Este martes, el Gobierno de Ruanda ha anunciado que recibirá a un máximo de 250 migrantes de Estados Unidos, como parte de un convenio con la administración de Donald Trump, donde se estipula que Kigali tiene ‘la capacidad de aprobar a cada persona’.
Según declaraciones de Yolande Makolo, portavoz gubernamental, a la BBC, los migrantes beneficiados con este acuerdo recibirán ‘formación laboral, asistencia sanitaria y alojamiento para comenzar una nueva vida en Ruanda’, enfatizando que es esencial que las autoridades ruandesas puedan ‘la capacidad de aprobar a cada persona propuesta para el reasentamiento’.
Desde Kigali se ha defendido el acuerdo, señalando que ‘casi todas las familias ruandesas han sufrido las penurias del desplazamiento’ y que los principios de la sociedad ruandesa se fundamentan ‘en la reintegración y la rehabilitación’.
Hasta ahora, no ha habido comentarios por parte del Gobierno de Estados Unidos, aunque se anticipa que se ofrecerán más detalles del acuerdo una vez que estén finalizados, como indicó Makolo.
Olivier Nduhungirehe, ministro de Exteriores de Ruanda, comentó en mayo que su gobierno estaba dialogando con Washington sobre un acuerdo similar. Recordó que no es la primera vez que Ruanda se involucra en conversaciones de este tipo, ya que previamente habían aceptado solicitantes de asilo del Reino Unido bajo el gobierno de Rishi Sunak, aunque el procedimiento fue desmantelado por el sucesor laborista Keir Starmer al asumir en Downing Street en 2024.