El gobierno militar que controla Guinea ha decretado la suspensión de las actividades de los tres partidos políticos más destacados del país durante un periodo de 90 días, justo una semana antes del inicio de la campaña de un controvertido referéndum para modificar la Constitución. Los críticos temen que este movimiento pueda facilitar que el general Mamady Doumbouya, líder del golpe de estado, consolide su poder indefinidamente.
Según un comunicado difundido por medios locales, Elhadj Ibrahima Kalil Condé, ministro de Administración Territorial y Descentralización, argumenta que la suspensión se debe a que ‘las tres organizaciones — la Asamblea del Pueblo de Guinea del expresidente Alpha Condé; la Unión de Fuerzas Democráticas de Guinea, del ex primer ministro Cellou Dalein Diallo, y el Partido de Renovación y Progreso — han ‘incumplido requisitos establecidos en un informe de evaluación’, según informa Guinee Matin.
Este motivo también fue utilizado por la junta militar para disolver más de 50 partidos políticos el pasado octubre y poner en observación a otros 67.
Desde su llegada al poder tras el golpe de Estado de 2021, la junta liderada por Doumbouya ha sido acusada por la oposición guineana de perseguir implacablemente a sus detractores. El general ha prohibido todas las manifestaciones desde 2022 y ha detenido, procesado o forzado al exilio a numerosos líderes opositores.
A pesar de haber prometido un referéndum constitucional y la transición a un gobierno civil electo para finales de 2024, estas acciones no se materializaron, aumentando las especulaciones sobre la posibilidad de que Doumbouya busque postularse en futuras elecciones.