El presidente Donald Trump ha firmado una orden ejecutiva este viernes para disminuir los aranceles sobre varios alimentos esenciales, entre ellos el café, la carne de vacuno y una amplia selección de frutas, debido a la insuficiente producción de estos en Estados Unidos.
“Específicamente, ciertos productos agrícolas que cumplen con los requisitos ya no estarán sujetos a dichos aranceles, como algunos alimentos que no se cultivan en Estados Unidos”, comunicó la Casa Blanca.
Estas modificaciones arancelarias vienen reforzadas por acuerdos comerciales recientes, incluidos los establecidos con Suiza y cuatro naciones latinoamericanas, permitiendo ajustar la lista de productos afectados por tarifas recíprocas. Entre los productos que se liberarán de aranceles se encuentran el café, el té, frutas tropicales como coco, mango, piña o papaya, además de plátanos, naranjas, tomates, frutos secos, cacao, especias, carne de vacuno y ciertos fertilizantes.
Además de estimular la competitividad, la reducción tarifaria también busca abordar el alza de precios que preocupa a los consumidores estadounidenses, especialmente después de que las recientes elecciones revelaran una creciente inquietud por la economía. “Los demócratas ganaron las gobernaciones de Virginia y de Nueva Jersey además de la Alcaldía de Nueva York con campañas centradas en la economía y programas sociales y en particular en la asequibilidad de los alimentos, una situación que Trump busca que no se repita”, señaló Bloomberg.
La presión económica y la alta demanda de ciertos productos han sido puntos de discusión intensa entre los productores agrícolas de EE.UU., quienes han expresado su preocupación por la viabilidad de su producción.
ACUERDOS COMERCIALES PREVIOS
Antes de esta decisión, el Gobierno de EE.UU. consiguió importantes acuerdos comerciales con Suiza y países latinoamericanos como Argentina, Guatemala, Ecuador y El Salvador. Estos acuerdos incluyen reducciones en los aranceles a la importación de productos específicos de estos países, en sectores como el agrícola y el textil, a cambio de una mayor apertura de sus mercados a los productos estadounidenses.










