Más de 20 agrupaciones políticas han respaldado la reciente Carta de Julio en Bangladesh, una iniciativa liderada por el gobierno de transición tras el derrocamiento de Sheij Hasina. Este proyecto busca instaurar una «reforma política integral» en el país. Entre los firmantes se encuentra el Partido Nacionalista de Bangladesh (BNP), dirigido por la ex primera ministra Jaleda Zia, junto con ocho formaciones aliadas y otras 16 agrupaciones, incluyendo varios partidos islamistas.
No obstante, la propuesta ha generado división, ya que varios grupos han optado por boicotear la firma, provocando manifestaciones en Dacca, la capital. Muhamad Yunus, líder del gobierno provisional y premio Nobel, ha subrayado que este acto marca «el inicio de un nuevo Bangladesh» y simboliza la «unidad» de la nación.
«Vamos a movernos hacia adelante para celebrar elecciones con este mismo espíritu de unidad. Las elecciones se celebrarán en febrero, y es esencial que esta atmósfera se mantenga», afirmó Yunus. Sin embargo, las protestas han requerido la intervención de las fuerzas de seguridad, que han utilizado gases lacrimógenos y granadas aturdidoras para controlar a los manifestantes cerca del Parlamento.
La mayoría de los manifestantes, que dicen haber liderado las revueltas contra el Gobierno de Hasina el verano pasado, han expresado que sus demandas no se han visto reflejadas en la Carta de Julio.