El Ministro de Exteriores de España, José Manuel Albares, ha comunicado desde Johannesburgo que la agresión rusa contra Ucrania no debe ser recompensada en las próximas negociaciones que se basan en el plan propuesto por el presidente estadounidense, Donald Trump. Durante su participación en la cumbre del G20 junto a otros líderes europeos, Albares ha destacado la necesidad de alcanzar una paz “justa y duradera” que no se traduzca en un simple interludio entre conflictos, y que cualquier acuerdo debe preservar la soberanía de Ucrania.
“No podemos permitir que una guerra de agresión tenga premio”, ha afirmado el ministro, poniendo énfasis en que los países europeos respaldan firmemente al presidente de Ucrania, Volodomir Zelenski, en este momento crucial. Ha subrayado la importancia de que cualquier decisión futura sitúe a Ucrania y a Europa en el corazón de las deliberaciones, dado el impacto directo sobre la seguridad del continente.
PROTAGONISTA DEL G20
Albares ha mencionado que el llamado “plan ruso-norteamericano” ha sido un tema central en las discusiones durante la cumbre en Sudáfrica, donde el presidente español, Pedro Sánchez, ha jugado un rol activo. El resultado de estos diálogos, que incluyen naciones como el Reino Unido, Canadá y Japón, ha sido positivamente valorado aunque se insiste en que no se debe negociar la paz a expensas de ceder territorio.
Se espera que las conversaciones continúen el lunes en una reunión en Luanda, en el marco de la cumbre entre la Unión Africana y la Unión Europea, donde se seguirá tratando el futuro de Ucrania. Además, están programadas negociaciones en Ginebra, que incluirán a altos representantes de la UE y donde se espera que Estados Unidos juegue un papel crucial para la seguridad y el futuro ucraniano.
NEGOCIACIONES EN GINEBRA
Albares recalca la importancia de que la Unión Europea, concebida como un proyecto de paz, juegue un papel fundamental en la resolución del conflicto. “Una guerra injusta no puede terminar con una paz injusta”, ha remarcado el ministro, quien ha valorado el éxito de haber logrado una declaración en el G20 que promueva el multilateralismo frente a los retos globales, a pesar de las diferencias de perspectiva entre los países.











