El secretario de Estado de la Seguridad Social y Pensiones, Borja Suárez, ha informado el martes desde el Congreso de los Diputados sobre la convocatoria del próximo lunes, 14 de julio, a la Mesa de Diálogo Social. Esta reunión incluirá a organizaciones empresariales, sindicatos y asociaciones de trabajadores autónomos para comenzar las conversaciones sobre el nuevo esquema de cotización de trabajadores autónomos para los siguientes tres años.
En su intervención, Suárez ha indicado que la reunión tiene como objetivo diseñar los nuevos tramos de cotización para los próximos años y rectificar «todos los problemas» identificados en el sistema de cotizaciones implementado en 2023.
El plan actual contempla una implementación gradual, donde cada tres años, dentro del contexto del diálogo social, se establece el calendario para la aplicación de este sistema, con una nueva estructuración de tramos de ingresos y bases de cotización que regirán de 2026 a 2028.
En 2025 se cerrará el primer ciclo de este periodo transitorio, justo cuando se ha completado el primer proceso de regularización de las cuotas de 2023 bajo este sistema. Suárez ha destacado que la implementación «está siendo un éxito», en un entorno donde los autónomos son cada vez más relevantes en el mercado laboral, con más de 3,4 millones de trabajadores por cuenta propia, y un incremento de 114,000 afiliados desde la activación del nuevo sistema. «Nunca en la historia hemos tenido tantos autónomos de alta en nuestro país», ha celebrado Suárez.
BALANCE PRIMER PROCESO DE REGULARIZACIÓN
Este ajuste es parte de una reforma basada en las recomendaciones del Pacto de Toledo de 2020, integradas en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia del Gobierno.
El propósito de la reforma era abordar un sistema que resultaba en «pensiones para los autónomos muy inferiores a las de los trabajadores asalariados», según Suárez. Más del 80% de estos trabajadores cotizaban por la base mínima, con pensiones hasta un 37% inferiores comparadas con otros regímenes y un 36% de ellos requerían complementos mínimos.
En el proceso de regularización iniciado en octubre de 2024, tras el cierre de la campaña del IRPF de 2023, se revisaron las cotizaciones de más de 3,7 millones de autónomos y se emitieron más de 4,2 millones de notificaciones.
Para más de dos millones de autónomos no fue necesario hacer ajustes, ya que 1,3 millones se ajustaron al tramo correspondiente y otros 800,000 estaban en situaciones no regularizables, como tarifa plana, subsidios o pensiones. No obstante, cerca de 1,6 millones fueron objeto de regularización. De estos, aproximadamente 796,000 cotizaron por debajo del nivel requerido y tuvieron que pagar diferencias, mientras que más de 460,000 lo hicieron en exceso y recibieron devoluciones. Además, 324,000 no presentaron declaración de rendimientos por diversas razones. También se registraron más de 429,377 renuncias a la devolución de cuotas.










