El PSOE ha declarado que no se opondrá a la iniciativa legislativa de Sumar que pretende restringir la adquisición de viviendas por parte de empresas y fondos de inversión, aunque ha solicitado al colectivo plurinacional que detenga sus críticas hacia la ministra Isabel Rodríguez.
En el Congreso, Sumar ha propuesto una modificación de la Ley de Vivienda para impedir que corporaciones, fundaciones, entidades jurídicas y fondos de inversión adquieran propiedades en España. Según el colectivo, estas compras superan en más del doble las cifras registradas en el pico de la burbuja inmobiliaria de 2008.
El diputado Alberto Ibáñez, portavoz de Vivienda de Sumar en el Congreso, ha liderado la defensa de esta propuesta y ha criticado a la ministra Rodríguez por iniciativas como la implementación del número de teléfono 047 para consultas sobre vivienda.
RESPETEN AL MINISTERIO
Desde el PSOE, Gabriel Blanco ha expresado que su grupo parlamentario está abierto a debatir medidas enfocadas a solucionar el problema habitacional, pero siempre reconociendo el “esfuerzo inmenso” que realiza el Ministerio de Vivienda. Ha instado a Sumar a respetar y no desgastar el trabajo gubernamental, que según él, es lo que buscan “precisamente quienes quieren tumbar este Gobierno”.
Antes de debatir la propuesta, el portavoz del PSOE, Patxi López, ya había coincidido en la necesidad de avanzar en las políticas de vivienda, pero con un enfoque respetuoso con la legalidad y la confianza en el sistema jurídico.
En cuanto a las otras formaciones, ERC, Bildu y BNG se han mostrado a favor de la propuesta de Sumar. El PNV y Junts, por su parte, han expresado sus reservas, argumentando que la medida propuesta no es temporal ni limitada territorialmente, lo que plantea dificultades para su integración en el sistema jurídico actual, según Maribel Vaquero del PNV. Marta Madrenas de Junts ha criticado la iniciativa por considerar que no soluciona problemas y solo restringe más el mercado.
Por otro lado, el portavoz de Podemos, Javier Sánchez Serna, ha evitado clarificar el voto de su partido y ha abogado por la expropiación de viviendas en manos de acaparadores.
Finalmente, el PP y Vox han censurado la propuesta. Carlos Gil del PP ha argumentado que la medida empeora la ya “nociva” Ley de Vivienda, mientras que Carlos Hernández Quero de Vox ha advertido que la reforma acabaría con la inversión en el sector inmobiliario.











