Vox y PP han protagonizado este martes un duro enfrentamiento en el Congreso a cuenta de la situación del sector primario y la agricultura. La formación de Santiago Abascal ha reclamado a los ‘populares’ que dejen “en paz” a los agricultores con las políticas que respaldan desde Bruselas, mientras que el partido de Alberto Núñez Feijóo ha respondido acusando a Vox de “populista”.
El intercambio de reproches ha surgido durante el debate de una proposición de ley registrada por el PP con el objetivo de declarar al sector alimentario español como sector estratégico esencial de la economía. El texto plantea un amplio paquete de medidas de carácter fiscal para reducir los costes de producción en el campo y, de este modo, apuntalar la rentabilidad y la continuidad de las explotaciones y empresas vinculadas al sector primario.
El portavoz del PP en la Comisión de Agricultura, Javier José Folch, ha defendido la iniciativa desde la tribuna, subrayando la necesidad de que se admita a trámite ante las “dificultades estructurales” que atraviesa el sector, derivadas de la situación geopolítica internacional, las guerras arancelarias, las catástrofes naturales o el incremento “desmesurado de los precios”.
En su intervención, Folch ha aprovechado para cargar contra Vox, al que ha definido como “populista” en su relación con el campo. Ha recordado que el partido de Abascal tuvo margen de actuación cuando compartió gobiernos autonómicos con el PP, incluso al frente de consejerías de Agricultura, pero que optó por salir “corriendo” para instalarse “en los sillones de la crítica negativa y populista”.
“A la primera de cambio salieron corriendo, salieron por piernas y abandonaron esos gobiernos, porque les resulta más fácil estar en la oposición, sin responsabilidades de gestión, criticando y haciendo del populismo su única bandera”, ha concluido el diputado del PP.
En la réplica, el representante de Vox Ignacio Hoces ha afeado al PP que impulse una ley en el Congreso en defensa del sector primario mientras, al mismo tiempo, pacta en Bruselas con el PSOE políticas que suponen “limitaciones” para las explotaciones agroganaderas y obligaciones medioambientales “que desprecian a los trabajadores españoles”.
“El campo español lo que quiere es que todos ustedes les dejen en paz, porque los productores españoles compiten con reglas imposibles y los productores extranjeros compiten sin reglas”, ha remachado Hoces.
PSOE y aliados de izquierda rechazan la propuesta del PP
En el turno de fijación de posiciones, la diputada del PSOE Trinidad Carmen Argota ha avanzado que su grupo votará en contra de la proposición de ley, al considerar que “no añade ningún instrumento útil” a los ya vigentes, “llega tarde, duplica lo existente” y está concebida más para “hacer ruido” que para aportar soluciones efectivas a los problemas del campo y de la cadena alimentaria.
El portavoz de Agricultura de Sumar en el Congreso, Toni Valero, ha insistido en que la propuesta del PP “no aporta certezas ni a agricultores ni a consumidores” y únicamente introduce “ideologías de mercado”. También ha criticado que el texto prometa disponibilidad hídrica para todos los territorios, algo que, a su juicio, es “engañar a la gente” y poner en riesgo la “seguridad hídrica”.
Por parte de Bildu, Mikel Otero ha calificado la iniciativa de propuesta “ideológica” que “no vale un pimiento”, mientras que la portavoz de Agricultura de ERC, Teresa Jordá, ha anunciado igualmente el voto en contra de su grupo al entender que es una ley “fallida” que no genera obligaciones, no fija recursos y no modifica ningún instrumento ya existente. “Es un marco declarativo”, ha resumido.
La diputada de Podemos Martina Velarde ha cuestionado la postura “contradictoria” del PP al presentar una norma para proteger al sector primario cuando, según ha denunciado, en las comunidades donde gobierna impulsa modelos que “están degradando” los territorios, como las macrogranjas hiperintensivas.
El PNV aprecia aspectos positivos, Junts critica el enfoque generalista
En nombre del PNV, Joseba Andoni Agirretxea ha reconocido algunos elementos “positivos” de la proposición, como la creación de mecanismos de alerta temprana, la rebaja del IVA de los insumos o el impulso al acceso de los agricultores al mercado de carbono. No obstante, ha advertido de que el texto tiene un marcado “enfoque centralista” al apelar al artículo 149.1 de la Constitución “para justificar una planificación económica de alcance estatal”.
El diputado de Junts Isidre Gavín ha rechazado también la propuesta legislativa por considerarla “generalista” y con numerosos aspectos sin concretar. Aun así, ha señalado que la alternativa al partido de Alberto Núñez Feijóo es un “Gobierno gestoría” que se limita a ejecutar lo que marca Europa y un Ministerio de Agricultura que, según ha dicho, “no arregla nada”.











