La cifra de migrantes que partieron desde Mauritania hacia Canarias ha experimentado una reducción del 52% hasta septiembre en comparación con el año anterior, con un registro de 8.178 llegadas, frente a las 16.976 del mismo periodo de 2024, de acuerdo con la información proporcionada por el Gobierno regional.
Este notable descenso también se ha registrado en las salidas desde Senegal (-77%) y Marruecos (-55%).
Representantes de la Unión Europea en Mauritania han analizado estos datos, expresando su confianza en que “seguirán cayendo si se cumplen los compromisos adquiridos”. Durante un encuentro en Nuakchot con altos funcionarios del gobierno local, la delegación europea destacó el compromiso del gobierno mauritano durante el último año para “dejar de ser una autopista de inmigración irregular” hacia Canarias, según un comunicado del Gobierno canario.
La reunión también sirvió para verificar los esfuerzos conjuntos, incluyendo la participación de España, para estabilizar este país crucial en el tránsito migratorio y las tensiones en la región del Sahel. Mauritania es considerada una zona clave por la Unión Europea, dada su estabilidad relativa frente a los desafíos en países vecinos como Burkina Faso, Níger y Mali, donde se observa la presencia de grupos militares y yihadistas.
La Comisión Europea colabora con Mauritania en seguridad para ayudar a manejar la situación de más de 300.000 malienses en su territorio, muchos de los cuales aspiran a continuar su migración hacia Europa a través de Canarias. Además, Bruselas gestionará la cesión de dos centros de tránsito en Mauritania a las autoridades locales en octubre, dentro de un acuerdo que exige el cumplimiento de ciertas condiciones y compromisos.
La política de contención de salidas terrestres, junto con la desarticulación de redes de tráfico de personas, ha modificado la ruta migratoria hacia países más al sur como Gambia y Senegal, y hasta Guinea Conakry, que se encuentra a 2.000 kilómetros de Canarias.
Esta semana, se espera una reunión importante entre el presidente de Mauritania y la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, para discutir los acuerdos bilaterales en materia migratoria. Los resultados de estos acuerdos se reflejan en las estadísticas de 2025, con un 5% a 10% de la población en Mauritania compuesta por refugiados.
Finalmente, la delegación de la UE en Mauritania ha enfatizado el valor de los proyectos de salud y educación en África Occidental, además de resaltar el proyecto ‘Tierra Firme’ del Gobierno de Canarias, que ofrece formación profesional a jóvenes de Senegal, Mauritania y Gambia, preparándolos para el empleo en sectores de alta demanda.