Fernando Grande-Marlaska, ministro del Interior, está programado para presentarse este martes ante la Comisión de Gastos Reservados del Congreso, en una sesión que se mantendrá bajo confidencialidad, para esclarecer cómo se han utilizado los fondos reservados de su departamento tras un periodo de casi tres años sin transparencia sobre este tema.
La llamada Comisión de Secretos, según la normativa vigente, tiene la responsabilidad de supervisar el empleo de los fondos reservados asignados a los ministerios de Interior, Exteriores, Defensa y al CNI. Los responsables de estos departamentos deben entregar un informe semestral sobre su gestión. Sin embargo, la última actualización sobre estos gastos se llevó a cabo a finales del 2022, durante la legislatura anterior. El 8 de noviembre fue el turno de Grande-Marlaska y el 16 de diciembre, de Margarita Robles (Defensa). José Manuel Albares, de Exteriores, no ha hecho aún su primera comparecencia.
El PP ya ha solicitado que estos tres ministros informen, y la primera cita ha sido ya agendada para Grande-Marlaska, quien además había ofrecido voluntariamente su comparecencia, programada para este 28 de octubre a las 13:00 horas.
En los Presupuestos Generales de 2023, que continúan vigentes tras su prórroga, se asignaron 27,86 millones de euros para gastos reservados, distribuidos de la siguiente manera: 19,8 millones para el CNI, 500.000 euros para Defensa, 7,37 millones para Interior y 186.310 euros para Exteriores.
COMPARECENCIAS PENDIENTES DEL CNI
La Comisión de Gastos Reservados también supervisa las actividades del CNI. Hay múltiples solicitudes de comparecencia para la directora del CNI, Esperanza Casteleiro, que aún no tienen fecha. Entre ellas, el PP desea que informe sobre la aparición y fuga posterior de Carles Puigdemont en el verano de 2023, y sobre su firma en un documento que alerta de ciberataques auspiciados por China.
Sumar y Esquerra Republicana también han pedido explicaciones sobre diferentes preocupaciones, incluyendo el uso de fondos públicos para asuntos personales del rey Juan Carlos y la conexión de los servicios de inteligencia con el imán de Ripoll, cerebro de los atentados de 2017 en Cataluña.
Desde el comienzo de la legislatura, la única sesión de esta comisión se celebró en junio, con la comparecencia de la vicepresidenta Sara Aagesen, quien explicó los detalles del apagón de finales de abril.
La comisión, que opera en sesiones cerradas, está constituida por un representante de cada grupo parlamentario, generalmente su portavoz, que debe ser autorizado por el pleno del Congreso para acceder a información clasificada como secreto.














