Mónica García, ministra de Sanidad y cabeza de Más Madrid, ha manifestado que la sanción impuesta al fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, por el Tribunal Supremo (TS) por el delito de revelación de secretos «deja a los pies de los caballos a toda la ciudadanía» y representa un «golpe letal» a la presunción de inocencia.
La ministra expresó su postura en redes sociales tras el anuncio del veredicto del TS, que inhabilita a García Ortiz por dos años y le impone una multa de 7.200 euros por revelar información confidencial sobre Alberto González Amador –pareja de la presidenta de Madrid, Isabel Díaz Ayuso–, quien recibirá una compensación de 10.000 euros por daños morales.
«La condena del FGE a quien deja a los pies de los caballos es a toda la ciudadanía frente al Estado de Derecho, la necesidad de pruebas incriminatorias y la presunción de inocencia, a las que acaban de asestar un golpe letal. 50 años de democracia merecían algo más que dejar todo atado y bien atado», planteó García.
El dictamen del TS, que no alcanzó unanimidad, contó con la aprobación de cinco magistrados –Andrés Martínez Arrieta, Manuel Marchena, José Ramón Berdugo, Antonio del Moral y Carmen Lamela– y el disenso de las magistradas progresistas Ana Ferrer y Susana Polo.
Este tribunal, de tendencia conservadora, emitido solo una semana después de un juicio histórico, el primero en el que un fiscal general del Estado ha sido juzgado, aún no ha surtido efecto ya que la sentencia no ha sido formalmente notificada y aún no está redactada.











