En una reciente intervención en Eslovenia, tras la cumbre del Med9, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha reafirmado su posición de que es viable incluir gastos destinados a combatir el cambio climático dentro del presupuesto de seguridad y defensa acordado con la OTAN. Este presupuesto debe representar el 2% del Producto Interior Bruto (PIB) de España para el año 2025.
Durante su comparecencia, Sánchez no especificó si otros países europeos respaldan esta medida, pero subrayó la posibilidad de “contabilizar algunas de estas políticas” de acción climática “como políticas vinculadas con la seguridad y la defensa”. “Y eso es lo que está haciendo el Gobierno de España en consonancia con la Unión Europea y también con la OTAN”, afirmó.
Sánchez destacó que su gobierno planea asignar un “13%” del incremento presupuestario, que supera los 10.000 millones de euros, a iniciativas de emergencia climática y protección civil. Esto se enmarca en el esfuerzo por alcanzar el objetivo del 2% del PIB en gastos de defensa este mismo año.
En la última cumbre de la OTAN, a diferencia de otros aliados que se comprometieron a invertir más del doble, el presidente español acordó un objetivo de gasto en defensa de solo el 2,1%.